Carlos García firma la crónica en La Voz de Galicia

El COB vio rota su racha de tres victorias consecutivas, en un partido en el que sólo fue capaz de aguantar 25 minutos ante un rival que a velocidad de crucero demostró tener más argumentos que el equipo de Rafa Sanz. La pobre aportación de tres hombres fundamentales como Starosta, Arco y Kalé resultó decisiva para la suerte de un equipo ourensano que ahora queda sin margen de error en las tres últimas jornadas.

Tal y como había vaticinado en sus peores augurios Rafa Sanz, Ourense arrancó muy frío y vio como su rival se ponía en franquicia muy pronto. Sendos triples de Chagoyen y Sabat y un control absoluto del rebote en su propio aro dispararon a los isleños a un 10-3 en apenas dos minutos obligando al técnico cordobés a solicitar tiempo muerto.

La reprimenda surtió efecto ya que los gallegos apretaron los dientes atrás, a pesar de que Arco se iba al banco con dos faltas por su incapacidad para frenar a un explosivo Richetti. En el otro aro, Starosta estuvo siempre muy tapado, en defensas por anticipación o en dos por uno, aunque la salida de Onyekwe dio otro aire a los ourensanos, que poco a poco comenzaron a ver aro.

El protagonismo entonces correspondió a Sony Vázquez, que con cinco puntos consecutivos puso a Ourense a un solo punto (17-16). Los de Sanz habían contenido la hemorragia inicial y llevaba el partido a donde le interesaba, en una estrategia en la que la defensa se imponía a los ataques para una producción ofensiva baja. Onyekwe, con dos nuevos puntos, puso al COB por delante por primera vez (19-20).

Sin embargo, el Tenerife despertó su caudal ofensivo y de la mano de Richotti y Lampropoulos hizo un parcial de 11/0 que puso el partido de lado local. Sanz jugó con fuego al no solicitar tiempo muerto, aunque la jugada le salió bien porque los suyos respondieron y con un 0/7 recortaron la desventaja hasta los tres puntos.

Lejos de volver a meterse en el partido, los ourensanos tuvieron otra pájara y gracias a varios contragolpes se quedaron rezagados en el marcador, personalizada especialmente en Salva Arco, que firmó una primera parte para olvidar. Aún así, dos titos libres de Galarreta y un triple de Fergerson permitieron irse al Ourense al descanso solo siete abajo.

En la reanudación, el arranque del COB fue prometedor, con seis puntos de Brown y un triple de Fergerson, que igualaron el marcador cuando habían pasado ocho minutos. Una aguerrida defensa interior dejó sin opciones en la zona al equipo tinerfeño, que recurrió al tiro exterior para salir del bache sin suerte. Sin embargo, el Ourense no supo rematar su buen trabajo y dejó que su rival se creciera, amparado en la conexión Richotti y Lampropoulos, y entre el argentino y el griego volvieron loca a la defensa cobista, a la vez que los visitantes perdían balones interiores.

El panorama acabó de torcerse en el arranque del último cuarto, con un triple de Yáñez y una canasta de Serrano (69-51). Sin noticias de Starosta, con Kalé desaparecido y un Arco desdibujado, el Ourense dobló la rodilla e hizo de los últimos minutos un calvario. La renta tinerfeña fue aumentando progresivamente (80-59).

Nota de Basketmanía: Cuando escribe Tenerife se refiere al Isla de Tenerife Socas Canarias, porque el Tenerife jugó por la mañana ante el Dominicas La Palma.