CB Medina Orotava en el recuerdo

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ARTÍCULO DE: Bruno Juan Álvarez Abréu

Fotografías. 1ª izquierda, correspondiente a la temporada (1972 / 1973), en la desaparecida Cancha de la Plaza de Franchi Alfaro de la Villa de La Orotava.

De pie de izquierda a derecha; Un servidor, Conchi Reyes, Candelaria Ruiz, Auxiliadora González Martín, Carmita de la Rosa y José Luis García. Agachados de izquierda a derecha; Angelita Hernández, Inmaculada González Martín, Floricel, Ana Dorta y Lourdes. 

Fotografía. 2º derecha, temporada (1970 – 1971) (el comienzo), en la desaparecida Cancha de la Plaza de Franchi Alfaro de la Villa de La Orotava.

De pie de izquierda a derecha: Chucho Dorta, Lourdes, Juani de La Rosa, Luisi, Nieves, Rosalía y Tata.

Agachados de izquierda a derecha; Juani, Yaya, Carmencita Jiménez y Candelaria Mora.

El CB. Medina Orotava, hace su presencia en la Villa al principio de la década de los años setenta del siglo XX. Sus comienzos fueron muy atractivo con cara a recuperar el baloncesto femenino en La Orotava, pero estos objetivos que en principios eran prometedor, finalizaron en el año 1976 en tragedia deportiva en la misma Cancha de Franchi Alfaro, lo que supuso la desaparición definitiva del Club y el baloncesto femenino en la Villa por muchos años.

Fueron muchas y destacadas las componentes de CB. Medina Orotava, pero quiero dejar claro que si se me queda algunas en el tintero, lo sepan reconocer; Trini, Cándida Rosa, Candelaria Ruiz, hermanas; Herminia y Juani, Conchi Reyes, Lourdes, Milagrosa García, Floricer, Concepción, Juani, Carmita y Candelaria de La Rosa, Ana Dorta, Angelita Hernández, Mila Expósito, Nieves González, Auxiliadora e Inmaculada González Martín, Mari Carmen Sánchez, y las hermanas Toña y Tata. Todas de la Orotava, muchas procedían del colegio orotavense de las hermanas de la Caridad “La Milagrosa”, otras del Instituto de segunda enseñanza de la Torrita, e incluso del colegio de la Asunción de Santa Cruz de Tenerife (caso de Milagrosa García).

El equipo surgió de la Sección Femenina Local, organizado y dirigido por la recordada jefa de la Sección de la Villa de La Orotava fallecida en la ciudad de Oviedo doña Ofelia Díaz Fernández, la cual se hizo cargo materialmente y económicamente del Club hasta su desaparición. Su primer entrenador fue Jesús Dorta Díaz fallecido (Chucho Dorta, conocido en el mundo folclórico por Benahuya) al que la señora Ofelia Díaz en principio le cedió los derechos de su delegación y preparación del conjunto, hasta que se incorporó al servicio militar. Entonces un servidor y José Luis García (peluquero jubilado), nos hicimos cargo del equipo técnicamente, creo recordar que por una temporada, ostentando el cargo de delegado y relaciones con la Sección Femenina Local José Luis Miranda Oliva (actual secretario del UD. Orotava) entonces miembro de dicha organización. Finalmente, una vez que Jesús Dorta cesa definitivamente como técnico titular por su marcha al extranjero, se hizo cargo de la preparación técnica el amigo y convecino de la Orotava Toño García ex jugador del AA. AA. Salesianos (actual CB. San Isidro), que en aquel tiempo trabajaba de mecánico – electricista en los talleres de Julito Villavicencio en la calle El Calvario.

Las dos primeras temporadas fueron de autentico crac en el deporte del básquet femenino tinerfeño, quedando imbatidas en la segunda categoría, ascendiendo a la máxima categoría del baloncesto en una sola temporada. Nada más debutar en la apotegma categoría, logran vencer en su cancha de Franchi Alfaro al potente y desaparecido CB. OM (antiguo CB. María Auxiliadora, campeón de España de su especialidad) capitalino que dirigía el recordado Foronda.

En el Medina Orotava, cabe destacar en principio el juego que ejecutaba magistralmente des arriba Candelaria Ruiz que era su organizadora, precisaba en las tácticas en zona apoyada por Herminia y Carmita de la Rosa. Por delante destacaban Lourdes que se convirtió en la gran jugadora fémina de la época y Milagrosa García que jugaba muy bien bajo los tableros hasta que se tuvo que ir a estudiar a Santiago de Compostela.

Durante la década participó en competiciones oficiales en distintas categorías del baloncesto femenino tinerfeño, en copas de María Auxiliadora y otros trofeos. Hasta producirse aquel infortunado encuentro contra el M. Arrecife de la isla de los volcanes Lanzarote celebrado el 21 de Marzo del 1976, en la Cancha de Franchi Alfaro, donde terminó en una grave desventura para el Club y para el Baloncesto Femenino de La Villa de La Orotava.

Artículo publicado en la prensa

El amigo desde la infancia de la Villa de La Orotava: FRANCISCO R. PÉREZ DELGADO, remitió entonces (21-3-76) estas notas que tituló; “LUTO EN EL BALONCESTO OROTAVENSE”.

Publicadas en la prensa tinerfeña el día 21 de Marzo del año 1976: “… Plácida. Villa de la Orotava, 21-3-76. Santas Perpetua y Felicidad. Cancha Franchi Alfaro. 12 de la mañana. Preliminares del partido CB. Medina Orotava – M. Arrecife: Ambiente cordialísimo entre las chicas lanzaroteñas y tinerfeñas. No sólo por la tradicional hospitalidad que se dispensan las gentes de ambas islas, si no porque, de cara a la clasificación, el encuentro a disputar era a filarmónico ni fú ni fá. Habitual promedio de 30 tranquilos seguidores. Si se suspendía el partido por incomparecencia del árbitro (moda de la temporada por la escasez de personal), atravesarían la calle como otros domingos, entraría  en el polideportivo Salesiano se sumarian al otro promedio de cien aficionados que prefieren el encuentro de los chicos. El guardia municipal de turno, fuerza, pública que se considera por estos pagos y para estos menesteres suficiente para velar el orden (¡hasta. la fecha nunca ha pasado nada!), cumplía rutinariamente su deber, alternando su presencia física en ambas canchas (tiene la pega de que cuando está en una no puede ver lo que sucede en la otra. Pero lo oye perfectamente y no precisa más de 15 segundos a paso normal para trasladarse al lugar preciso). Llega el hombre del traje gris. Comienza el encuentro. Empieza a silbar ciertamente imparcial. Pero en un escamante tono altanero, mucho mirar sobre el hombro, no concediendo las más mínimas explicación en las jugadas dudosas… ¿soberbia? ¿Desahogo de mal humor ajeno a cuanto allí sucedía?  Es opinión comúnmente aceptada, que quien juzga un partido de baloncesto, si tiene inteligencia normal y un mínimo de rodaje, puede distinguir fácilmente el 80 %, de las veces, sin temor a confundirse, teatro de realidad. Otros porcentajes pueden darse naturalmente en superdotados e idiotas. Muchos por propia experiencia y otros por razones obvias también aceptan comúnmente que, cuando el choque se produce contra un poste (en este caso de hierro y sin acolchar) en principio de teatro nada de nada.

Y es lo último, en Jugada fortuita, fue lo que te sucedió a la pequeña hermana de Ventura de La Rosa. Pero el señor de Gris en ribete de sadismo amparado por el reglamento, permitió que siguiera la jugada no imitando a muchos de sus colegas, más humanos, que en estos casos no dudan en interrumpir el juego, por si las moscas. Y luego, de recochineo como, viera que el entrenador Toño acudía a interesarse por, la mayor o menor importancia del golpe pues… técnica que te pego, faltando poco para ser respondía con un puñetazo, afortunadamente auto dominado. Penalización del conato de agresión: ¡40 partidos y 10.000 pesetas de multa! y también para la jugadora Auxiliadora que estaba cerca de la mesa, e igualmente muy auto dominada puesto que al estallar el cronometro surgió de blanco el negro asfaltico y no el gris silbático: ¡ 16 partidos y multa al club de 25.000 pesetas! Súbitamente atacado de coribantismo (¿picadura de viuda negra?), el árbitro huyó despavorido. Se supone que bajo la influencia de la subsiguiente importante calentura, provocada por la ponzoña tarantulera, redactara esa historia para no dormir de modo y, manera que no admitiera vacilaciones para que esos señores a dos mil kilómetros del lugar de los tragicómico sucesos, comprendieran la necesidad de cargarse inmediatamente a este modestísimo equipo. La sección especializada del periódico deportivo «As” aprovechó, regocijada, la oportunidad para insistir, sobre su conocida tesis según la cual los jugadores y aficionados tinerfeños no somos otra cosa que una “jarcas» de energúmenos. Total: R.l.P. del Medina Orotava. Tus desconsolados seguidores perdonan contigo a quiénes te dispensaron en vida tan despiadada justicia terrenal y confían que, D.M. las iras no lleguen hasta el. Drago de lcod, y que tu desdichado hado no resulte estéril…”