Así vieron el DERBI en las web’s de los dos clubes

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El Iberostar Tenerife despide un mágico 2017 con una autoritaria victoria ante el Gran Canaria

WEB CB CANARIAS

El Iberostar Tenerife dio este sábado un puñetazo sobre la mesa para llevarse con autoridad la gran fiesta del basket canario y poner la mejor guinda posible a un mágico 2017. El grupo de Fotis Katsikaris se adjudicó el derbi ante el Herbalife Gran Canaria (92-71), tras una primera parte de ensueño (55-30), cimentada en una exhibición de intensidad de los aurinegros y un recital desde el 6,75: 12/17 en triples al descanso.

La excelente puesta en escena de los tinerfeños les disparó en el electrónico para acabar firmando un destacado ejercicio colectivo. Hasta cinco jugadores en dobles dígitos de valoración y 20 asistencias al cierre explican en parte un gran trabajo coral que tuvo de inicio a dos nombres estelares: Javier Beirán y Davin White.

Arrancó el choque con los anfitriones un tanto titubeantes y un Granca sólido (0-2, 3-5, 5-7), pero tras errar sus tres primeros ataques, el conjunto aurinegro se puso en modo ciclón. Dos triples de White y otros tantos de Beirán (16-7, min. 6) dieron el primer aviso serio a navegantes para luego ir desarbolando de manera progresiva a un rival, el amarillo, que concedió más canastas fáciles de la cuenta.

Se empleó a fondo el grupo de Katsikaris para firmar una de las mejores primeras partes que se recuerdan en el Santiago Martín. Duro atrás y con paciencia y cabeza suficientes para circular el balón con mucho criterio, el Iberostar Tenerife fue estirando su renta de tres en tres. Vasileiadis y Tobey se unieron a la sangría desde la larga distancia de Davin y Javi (cuatro triples cada uno al descanso); mientras que el Granca llegaba superado al receso (55-30).

Lo intentó el cuadro de Luis Casimiro, tras la pausa aprovechando el talento exterior de Markus Eriksson, primero; y la intensidad, después, de Xavi Rabaseda. El caso es que el Canarias no dio pie a que la reacción visitante tuviera mucho fundamento. Con un plan meticulosamente diseñado y ejecutado con brillantez, apenas hubo noticias de los interiores visitantes.

La gran labor en los intangibles de jugadores como Tim Abromaitis o San Miguel (12 de valoración anotando solo dos libres) explican el sentido solidario de un equipo, el canarista, que hoy dio un paso al frente ante la ausencia de Mateusz Ponitka por lesión para embriagar de felicidad a un Santiago Martín lleno hasta la bandera.

En medio de un nuevo arreón, el conjunto local se fue incluso hasta los 32 puntos de ventaja (68-39). Solo el amor propio del Granca impidió que la estampida aurinegra fuera a mayores, pero no evitó que la hinchada canarista festejara como se merecía una mágica despedida de 2017.

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DERROTA SIN PALIATIVOS EN LA LAGUNA (92-71)

EL HERBALIFE GRAN CANARIA SUFRIÓ UNA SEVERA DERROTA EN LA LAGUNA.

WEB CB GRAN CANARIA.-

El Iberostar Tenerife llegaba a la gran cita del baloncesto canario con ganas de mantener su buena dinámica. El equipo de Katsikaris, con una semana completa para preparar el encuentro, se medía a un Herbalife Gran Canaria que 72 horas antes había disputado tres prórrogas en 7Days EuroCup ante ASVEL Villeurbanne. Sobre este asunto giraron muchas de las declaraciones de la previa; pero rápidamente perdió cualquier peso posible como factor.

Porque el equipo aurinegro fue un auténtico rodillo. Durante los primeros dos minutos de encuentro ningún equipo anotó y fue Eulis Báez quien abrió el marcador desde la línea de 4,60. Sus dos aciertos vinieron seguidos de dos triples de Davin White y Marcus Eriksson. El conjunto grancanario apenas aguantó unos cuantos empujones más. Una canasta, otra, de Báez, volvía a poner con ventaja (5-7, minuto 4) a los visitantes. Tras eso, el delirio lagunero.

Al Iberostar Tenerife le entró absolutamente todo. Algunos aciertos llegaron por desajustes defensivos del equipo claretiano y otros desde la total confianza de los jugadores canaristas. Un parcial de 14-2 dio la vuelta completamente al choque y el Herbalife Gran Canaria se quedó pronto sin respuestas. Sin Albert Oliver en la rotación, Paulí actuó de base y Xavi Rabaseda adquirió protagonismo anotador con cinco tantos consecutivos. A pesar del trance en el que se encontraban los aurinegros, el empuje del propio Rabaseda y de Aguilar hacía que al término del primer cuarto aún hubiera partido (26-18).

Era una diferencia, quizás, irreal. Pero en lo negativo, y no en lo positivo. El Iberostar Tenerife de Fotis Katsikaris exhibió un baloncesto de muchísimos quilates en el segundo cuarto. Maquillaba algo Anzejs Pasecniks con una acción de canasta más adicional, pero la realidad se imponía con peso en el Santiago Martín. Vasileiadis se unía a la fiesta y clavaba el octavo triple (de once intentos) de la noche para los tinerfeños. Era de nuevo una diferencia de dobles dígitos (34-24, minuto 14), y no volvió a bajar de ahí.

El parcial de los últimos cinco minutos del segundo cuarto fue de 21-6. El equipo aurinegro arrasó con un juego alegre y rápido. Sobre todo, también, con un enorme acierto en el tiro de tres. Al intermedio, los de Katsikaris firmaban un terrible 12/17 en triples con 13 asistencias. Fue un monólogo con ambiente festivo para un recinto lagunero que vibraba con los suyos. Lo decía Báez nada más concluir la primera mitad: “no sabemos dónde estamos”. Al descanso, 25 de diferencia (55-30).