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«Clark prende la mecha de la exhibición», titula Noticias de Gipuzkoa

NÉSTOR RODRÍGUEZ GORKA ESTRADA (PERIÓDICO NOTICIAS DE GIPUZKOA)

DONOSTIA– Daniel Clark prendió la mecha y el resto de sus compañeros le secundaron para acabar encendiendo la traca de la exhibición. Porque lo del Delteco GBC de ayer fue una exhibición total. En defensa y en ataque. El equipo de Porfi Fisac arrolló de principio a fin a uno de los gallos de la ACB, el Tenerife, para sumar su sexta victoria del curso y seguir así con un margen de dos triunfos respecto a la zona de descenso. Un margen holgado, ganado a pulso por un GBC que sigue rayando a un nivel muy alto. Tras dar una paliza al Burgos y plantar cara durante bastantes minutos al Barcelona, el conjunto guipuzcoano confirmó ayer que se encuentra en un momento dulce, cada vez con más jugadores enchufados y un nivel grupal muy alto. El GBC es intenso y duro atrás, y juega bien en ataque. Mueve con rapidez el balón y siempre encuentra buenas opciones de tiro. Si además entran, pues pasa lo de ayer. Que se exhibe y gana.

Todos los jugadores que saltaron a la cancha reclamaron su cuota de foco, pero si hay que buscar al hombre que desencadenó la exhibición, ese es sin duda Daniel Clark. Porque el ala-pívot británico fue el gran protagonista del inicio del choque, anotando cuatro triples y un tiro de dos sin fallo en los seis primeros minutos y abriendo ya una renta de catorce puntos para su equipo (21-7). Clark estuvo absolutamente desatado. Por todos es sabido que se trata de un jugador irregular, capaz de brillar un partido y de pasar desapercibido el siguiente. Pero cuando tiene el partido, puede ser absolutamente decisivo y para un equipo modesto como es el GBC esto equivale a victorias. Nadie le puede pedir constancia, defensa y rebotes -para eso está Fakuade-, pero si tiene unos cuantos días así, su fichaje estará más que amortizado.

Este fulgurante comienzo de Clark y la ventaja adquirida por el Delteco GBC acabó resultando determinante, porque a partir de ahí el equipo de Fisac dominó con mano de hierro el partido. Su intensidad no bajó ni un ápice durante los 40 minutos. Quiso más la victoria que el Tenerife y pasó por encima de un rival que se estaba jugando la Copa y que se quedó sin recursos más allá de tirar triples a la desesperada. En la canasta de enfrente, en cambio, cada ataque tenía sentido y poco a poco la ventaja iba aumentando. El GBC era como un martillo. Siempre golpeando a un aturdido Tenerife. Del 27-13 al término del primer cuarto se pasó al 33-16 con la entrada en cancha de Henk Norel y Jordan Swing, que habían empezado en el banquillo. Una muestra de que la plantilla responde. Cabe destacar ahí a Fede Van Lacke, convertido en un secundario de lujo, que tanto defiende como sube el balón y anota. Por si faltaba alguien, antes del descanso se unieron a la fiesta Fakuade y Dani Pérez -muy bien el base en la dirección-, así que en el minuto 20 la renta era ya más que importante: 41-21.

UNA RENTA DE 28 PUNTOS

En la reanudación se podía esperar una furibunda reacción del Tenerife, pero sucedió lo contrario. El Delteco GBC siguió mandando. El quinto triple de la tarde de Clark, una canasta de Van Lacke y un 2+1 de Norel le permitieron aumentar su renta primero hasta los 23 puntos (51-28) y luego hasta los 28 (56-28) con otras tres acciones de los mismos protagonistas. Mediado el tercer cuarto, la paliza estaba siendo de escándalo. Motivada no tanto por los deméritos del Tenerife, sino por los indiscutibles méritos del GBC, que quizás jugó su mejor partido de la temporada, aunque ya ha hecho unos cuantos muy buenos.

Trató de reaccionar ligeramente el equipo visitante, que se puso a 18 puntos (63-45) gracias a un arranque anotador de Vasileiadis, pero al Delteco GBC nunca le tembló el pulso y siguió encontrando maneras de anotar: Agbelese, Dani Pérez, Fakuade… todos participaron de la fiesta, incluidos en los últimos minutos Xabi Beraza y Asier Azpeitia, a los que Fisac dio entrada. Ambos aprovecharon la oportunidad para sumar cinco y dos puntos. El GBC -que metió once de los 19 triples que intentó- dejó un inmejorable sabor de boca y sigue en una línea muy buena, cada vez más consolidado en la ACB.

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«El baloncesto, un juego de puntería», titula el Diario Vasco

Triunfo inapelable del GBC basado en una fantástica primera parte con Clark como estrella

Las claves

1 Clark. Un primer cuarto para enmarcar. Catorce puntos y cuatro triples sin fallo. A partir de su muñeca se cimentó la victoria del Delteco. Es lo que tiene el triple.

2 Asistencias. El cuadro donostiarra jugó un encuentro excelente. Así lo acreditan las 24 asistencias que repartió. Pocos egoísmos en busca del jugador mejor posicionado para anotar. El ABC de este deporte.

3 Aplomo. Quizá faltó un poco de poso en varios ataques. Algo que se adquiere con la experiencia. Si no el resultado hubiera sido de escándalo.

Las navidades son las fechas de los niños. Los más pequeños sonríen de felicidad al recibir los regalos que han pedido. El Delteco rejuveneció este domingo unos cuantos años. Se fue feliz después de borrar del mapa a todo un Iberostar Tenerife. este domingo no lo pareció pero créanme que es un gran equipo. Doce buenos jugadores y un entrenador que conoce la Liga Endesa. Aunque este domingo se le fue un poco de las manos y terminó expulsado. ¿Será coincidencia que Katsikaris fuera expulsado por Pérez Pérez, el mismo que echó a Porfi Fisac el día del Bilbao Basket? Bueno, no importa mucho la respuesta.

Lo cierto es que el cuadro donostiarra subió este domingo la sexta victoria a su casillero y pone un poco más de tierra de por medio respecto a los puestos de abajo. Tiene la mitad del camino recorrido porque puede que doce a final de temporada sean suficientes para salvar.se Y ojo, que quedan dos partidos.

El GBC está a un triunfo del Obradoiro y juega contra los gallegos la semana que viene. Es decir, que si les gana, se pondría por delante, después de que los compostelanos hayan sido durante una buena parte del campeonato una de las revelaciones de la Liga junto con el Fuenlabrada. A ver si la revelación del campeonato va a jugar en Illunbe…

El Delteco salió a mil por hora y desde ahí fraguó su triunfo. Todo una premonición porque el partido se iba a empezar a cocer desde fuera. El Delteco echó a sudar acompañado de una puntería inusitada. Van Lacke, Clark y Agbelese anotaron los tres primeros tiros. En defensa había que tener especial atención a Richotti y San Miguel se encontró con varios triples librados que no acertó.

Suena el Big Ben en Illunbe

Justo lo contrario que Daniel Clark. El inglés sacó su arma de precisión y se empezó a hacer gigante. Conectó dos triples consecutivos que dieron la primera ventaja seria al cuadro de Fisac, 12-5 (min.4). Clark metió los dos sin apenas esfuerzo. Como si tal cosa. Recibir y tirar. Como si antes de que le llegara el balón a las manos supiera que iba a ir dentro. Agbelese dejó su sitio en la pista a Norel después de que el nigeriano hiciera un gran trabajo. Pero la fiesta iba a continuar. El GBC tenía el ticket para pasárselo bien.

Chery metió otro triple, Katsikaris pidió tiempo muerto pero a la vuelta del corrillo Clark apuró su té comprado cerca de Greenwich y metió su tercer triple. Júbilo en las gradas. Rosco Allen salió por Abromaitis para tratar de que el británico no siguiera con su fiesta particular, pero todavía le quedaba algo de infusión en la taza. Metió su cuarto triple, 21-7 (min. 8), en una de las mayores rachas ofensivas vistas en Illunbe. Solo le falto calarse un bombín. El Big Ben, o Big Dan, había sonado cuatro veces. Y su única canasta de dos puntos fue pisando. Un recital.

El Iberostar estaba grogui. Ni defendía ni atacaba porque era una máquina de fallar desde el 6,75 (1 de 9 en el primer cuarto). Katsikaris movió todas sus piezas sin encontrar nada que le convenciese. A todo esto, Van Lacke clavó el sexto triple del Delteco en el primer cuarto para cerrarlo con un sideral seis de siete antes de que Chery fallara el último a la desesperada. La ovación hasta que los jugadores se fueron al banquillo fue cerrada por parte del respetable que gritó ‘GBC, GBC’ ante una exhibición ofensiva.

Se esperaba que el cuadro aurinegro saliera con el cuchillo entre los dientes en el segundo cuarto pero le costó horrores hacer una canasta en juego. De hecho solo anotó desde el tiro libre. Por contra los dos balones que le llegaron a Norel los metió a la cazuela y Swing provocó una antideportiva anotando los dos tiros libres. Es decir, las cosas seguían igual, con el Delteco dominando el ritmo, el tiro y los tableros. Dani Pérez jugó muchos minutos con Chery al ‘dos’. Estuvo fallón el canadiense pero siempre se encontraba alguna solución. Como un triple de Fakuade o una penetración de Dani Pérez marcando los pasos de manual para anotar una bandejita. En suma, el festival parecía que no iba a llegar a su fin. El 41-23 que reflejó el luminoso cuando los protagonistas se fueron al vestuario no podía ser más veraz de lo que fue la primera parte.

Con un minuto bastó

No hubo problemas ni apuros. A la segunda jugada el Delteco dejó claro que el partido no se le iba a escapar. Fue una delicia. Se acababa la posesión, Chery penetró y cogió ventaja. Pase a Salvó, este para Van Lacke y el último pase extra para el paciente inglés. Triplazo de Clark. este domingo era el día y se aprovechó.

Tras triple de Abromaitis, 48-28 (min. 23), en apenas un minuto el GBC desarboló a su rival. 8-0 de parcial y el cuadro de Fisac doblaba a su enemigo, 56-28. El público se frotaba los ojos. Y es que no solo era atacar. Porque la defensa donostiarra fue durante ratos excelsa. Sí es cierto que dejaron la línea de tres un tanto desguarnecida, pero teniendo en cuenta que este domingo no era el día de los tinerfeños desde el triple, había que arriesgar. Vasileiadis agitó un poco la coctelera pero las distancias siempre rozaron los veinte puntos. El GBC aprovechó, aunque no del todo entrar en el bonus para matar el partido desde el tiro libre. Katsikaris fue expulsado por protestar y se entró en el último cuarto con la sensación de tener el encuentro cerrado. Faltó un poco de aplomo y poso en algunas decisiones, sobre todo de los exteriores, pero al final todo el mundo pudo disfrutar.

Sobre todo Xabi Beraza y Asier Azpeitia. Jugaron, y lo más importante, anotaron. El primero de ellos un triple que fue de lo más aplaudido por el público. El Delteco ha sacado dos importantes partidos en una semana que le ponen en el camino para lograr la salvación.