La previa en el diario catalán «El Punt»
El Girona, liberado de presión, arranca con buen pie el «play-off»
Ni la limitación de efectivos ni el potencial rival pone freno a su grado de ambición.
Fontajau debe empujar duro porque tiene un rol muy relevante en la serie
Pep Ortega ataca en presencia de Guillén y Chagoyen. FOTO LLUIS SERRAT
INFORMACIÓN DE JORDI PRAT/
Para encontrar la última derrota del Girona hay que retroceder hasta el 11 de marzo. El detalle es tan deslumbrante como las seis victorias seguidas que acredita su hoja de servicios ahora, en el umbral del arranque del play-off. El paso de los días y los partidos han convertido aquella plantilla a priori debilitada por el Valencia en él marcharon David Navarro y Middleton-en un bloque rocoso y repleto de autoestima, capaz de dar disgustos a cualquiera en esta recta final de curso. Esto, siempre que las piernas aguanten. Y es que la falta de fondo de armario es el principal handicap en unas series que, si se estiraran al máximo, harían jugar 15 partidos en poco más de un mes. Una barbaridad. Como mínimo, Ricard Casas ha podido recuperar para hoy Kedzo.
Cumplidos con creces los objetivos del curso, el equipo quiere apelar al carpe diem, disfrutar de cada partido, porque ha costado mucho llegar hasta aquí. Pero que nadie se engañe: la falta de presión no implica falta de ambición. Al contrario. «Queremos llegar tan lejos como sea posible», espetó el técnico gerundense en una clara declaración de intenciones. De hecho, esta primera serie, de cuartos, la tiene con el factor pista favorable. Y, en Fontajau, el Girona no pierde desde el pasado diciembre (9 triunfos seguidos). Si esta fiabilidad se mantiene y se va a Canarias con un 2-0 la próxima semana, tendrá mucho trabajo adelantado para pasar.
No se puede obviar, sin embargo, que en frente hay un rival peligrosísimo. Si bien es cierto que tiene lagunas a domicilio, el Canarias tiene un inmenso talento en ataque, también en cantidad. Tanto es así, que el hecho de que Yáñez sea duda no genera inquietud, porque el perímetro hay piezas como el Llagostera Sàbat y Richotti. Además, la presencia del MVP, Richi Guillén ya es intimidatoria. Por tanto, hay que Fontajau tenga un buen aspecto y arrime el hombro. El equipo se lo merece.