Manolo Gómez asume el mando, en funciones, de la Fundación

Calentita, como se presumía, resultó la reunión extraordinaria de los patronos de la Fundación de Baloncesto. La polémica se hizo presente desde el «minuto uno», cuando Victoriano Rodríguez llegó acompañado de un abogado, al que la totalidad de los asistentes prohibieron el acceso a la reunión. El siguiente «objetivo» del ya ex presidente  fue su intención de grabar íntegramente lo que se iba a comentar, lo que fue también rechazado por todos los demás patronos, incluida la consejera del Cabildo, María del Cristo Pérez.

Después de minutos de intercambio de palabras Victoriano quiso conocer las razones que llevaron a los patronos a presentar el voto de censura, indicándole uno de los asistentes que estaba muy claro: por no estar suficientemente capacitado para llevar dicho cargo.

El momento más crítico fue cuando el patrono del CB Canarias, Francis Cedrés, calificó de cínica la actuación de Victoriano, concretamente le indicó: «Eres un cínico de miedo». De inmediato se levantó y abandonó la reunión diciendo que se le había insultado gravemente.

Se estableció, por votación unánime, que se le hará llegar un comunidado oficial a Victoriano Rodríguez sobre la decisión de los 11 patronos de promover el voto de censura, que deberá ser aprobado en la siguiente reunión de la Fundación.

Lo de cesar al vicepresidente no se recoge en los estatutos. El presidente puede nombrar los cargos pero nunca cesarlos, misión que corresponde a todos los patronos.

En otro orden de cosas, no debe descartarse que la Fundación, con el respaldo del Cabildo de Tenerife, promueva la celebración con carácter de urgencia de una Junta de Accionistas, con el claro objetivo de promover un VOTO DE CENSURA al actual consejo de administración e invitar a otras personas vinculadas con el baloncesto de la Isla a asumir esos cargos hasta que se cumpla el Convenio de Convergencia.

Dicho esto considero que llamar cínico a una persona no es un insulto gravísimo, como apuntó Victoriano Rodríguez, sobre todo cuando sus actuaciones invitan a hacer uso de esta definición. Lo de acudir con un abogado o querer grabar la reunión es otra jugarreta infantil. Vamos, un chiste más de la colección de Rodríguez.