El UB-Navarra, por Víctor Martín

ub la palma     60
navarra    72

UB La Palma:

(13+14+19+14). Díaz (5), Martínez (4), Bonhome (6), Sikma (20), Tavares (4), -inicial-, Schaftenar (10), Kloos (-), Arrocha (7), Santana (-), López (-) y Domínguez (4).

Navarra:

(15+13+18+26). Langford (7), Sanz (9), Rakocevic (10), Narros (10), Starosta (11), -inicial-, Savitski (-), Uriz (11) y García (14).

Arbitros:

Terreros San Miguel y Serrano Velázquez. Una vara de medir distinta para cada equipo, lo peor que se puede decir de unos colegiados. Pitaron 22 faltas contra La Palma y solo 10, sí ¡diez!, del Navarra. Se puede ayudar al rival, pero con más elegancia “porfa”.

Parciales:

7-10, 13-15, 20-23, 27-28, -inicial-, 37-35, 46-46, 50-57 y 60-72.

Incidencias:

Tercer partido de la primera eliminatoria por el “play-off” de ascenso ante unos mil aficionados.

V. MARTÍN, S/C de La Palma

“El palmero va a la guerra si lo animan, pero si lo dejas solo se sienta a tomar cañas”. (Carlos Toledo).

Nadie les tocó el orgullo. Ni uno  fue capaz de salir para decir en público que era un play-off de ascenso, que nos iba la historia, que sobre la mesa estaba un sentimiento y que había que quedar segundos de la LEB. Que luego ya se vería. ¡Qué somos La Palma! Al contrario, se hartaron de vender miserias, finales de un proyecto, camisetas que se pudren, que esto, al fin y al cabo, no iba con nosotros. El resultado, mil personas en el pabellón y un equipo sin ayudas, tristón. Al final perdió ante un Navarra que será muy bueno, lo será, pero que juega a ralentí, sin banquillo. 1-2 en una eliminatoria que el cronista cree, aunque solo lo crea uno, que el UB puede superarla.

El partido tenía dos posibilidades. Que se jugara rápido, un encuentro caliente, de “sangre”, de los que siempre gana La Palma, o  una pachanga de ritmo cansino, entre “muertos”. Pues bien, los dos primeros cuartos se jugaron a la velocidad del Navarra. Langford se encargó con dos triples de dar ventaja a su equipo. El “UB” no corría, la grada comía “pipas”, le importaba un “comino”  lo que ocurría, y gracias a que Sikma (el mejor) y Schaftenar, los dos pivots, acertaban bajo el aro. Con una canasta de tarde en tarde, el primer parón reflejó un 13-15. Detrás, bien, con un inmenso trabajo de Tavares sobre Starosta.

A la vuelta, un “tablón” en la boca del estómago. El UB metió cinco canastas y ellos otras tantas. Pero lo peor es que no había tensión. El cronista estuvo en Granada con aquel equipo de Rafa Sanz, Urtasun, Triguero… Fue el primer play-off. Ellos, que ascendieron, temblaban. Allí y en Miraflores. Ganaron, vale, pero pasaron terror. Se les manchó el slips (¡uys!, que fino para no decir calzoncillos). Al aficionado de La Palma le saltaban los ojos de la cara viendo a su equipo. Pero ahora, le vendieron a mi gente, a los nuestros, que quizás era mejor haber sido décimos. ¡Cállense por un día! Nada, que una canasta de Sikma, un triple de Arrocha y otro de Díaz, respondidos por García, Narros y la canasta de tres sobre la bocina de Rakocevic, mandaron a los equipos al vestuario.

Antes de arrancar el tercer cuarto, uno (ósea yo) se acordó de Mahatma Gandhi. ¡Mira que pensar a esas horas en un “tipo” bajito y calvo!. Pero sí, él dijo aquello de “la alegría está en la lucha, en el esfuerzo, en el sufrimiento que supone la lucha y no en la victoria”. Los primeros minutos de la reanudación fueron explosivos. La Palma estuvo corriendo un par de minutos. Se puso 37-32 arriba. Navarra puso manos en los costados, agachó la espalda… sí, es lo que está pensando, buscaba oxígeno. Pero el “UB” se paró cuando Terrenos y Serrano comenzaron con un recital de pitos, de faltas, de todo hacia un lado.

El público normal de La Palma, el de antaño, se comía a los árbitros. Salía el “Canelo” en busca de los alterados. Ayer, un gritito aislado. Pequeño, para no ofender… Un buen Rakocevic, con la ayuda de Narros, fue suficiente, junto a los árbitros, para neutralizar a Sikma. 46-46.

En el cuarto final, Navarra ganó sin esforzarse. Tomó ventaja pronto y la administró. Un enorme Starosta bajo el aro, los lanzamientos de García y la nulidad ofensiva de La Palma, donde solo Sikma mostró calidad, pusieron el 60-72 ante una pasividad impropia de la grada… El domingo venga con su camiseta, pinturas de guerra y olvide las pobrezas. Piense en divertirse, que el UBpuede remontar esto. Yo, lo creo. ¡Sí se puede!