La previa en el Heraldo de Aragón

J. Mercadal. Zaragoza| HERALDO DE RAGÓN.

El conjunto aragonés pone rumbo a Tenerife con la mentalidad de que posee ante sí un choque duro en casa del recién ascendido CB Canarias.

Imágenes del encuentro entre el CAI y el Caja Laboral en el pabellón Príncipe Felipe.. EFE

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Olvidada ya la imponente victoria conseguida en la primera jornada frente al Caja Laboral, el CAI Zaragoza prepara los últimos detalles para enfrentarse este sábado, a las 18.30, al CB Canarias. Sobre el papel, el conjunto más débil dentro del fuerte inicio de temporada que poseen los aragoneses ante sí. Un compromiso del que, sin embargo, el cuadro rojillo no se fía. Avisando del peligro que conlleva visitar el feudo canario, que celebrará su primer partido de Liga Endesa ante su público. Todo un acontecimiento que los hombres de Abós pretenden aguar.

Así lo reconoció Jon Stefansson, que atendió a los medios antes del último entrenamiento realizado por el CAI en suelo aragonés. “Es una fiesta para ellos, pero para nosotros es una guerra”, afirmó respecto a la atmósfera que los zaragozanos esperan encontrarse en el Santiago Martín. Un pabellón que, por su fisonomía, con las gradas próximas a la pista, y aforo, se espera una buena entrada, apunta a ser uno de los más calientes de la categoría.

Pedro Llompart, compañero en el juego exterior del islandés, posee unas sensaciones previas similares. Por ello, el base avisa de que ganar no será nada fácil. “Esperamos un partido muy complicado, que ellos sean un recién ascendido no tiene nada que ver. Todo lo contrario, pensamos que van a tener un ambiente muy positivo alrededor y que van a estar muy motivados”, aseguro el jugador mallorquín.

Claro que los jugadores aragoneses aceptan el reto de buena gana. Espoleados por el gran partido firmado ante el Caja Laboral, los rojillos están deseando saltar a la pista para intentar lograr su segundo triunfo. “Vamos con todo el respeto del mundo, pero sin miedo. Imagino que estará lleno y será una olla a presión, pero a todos nos gusta jugar partidos así”, aseguró Llompart.

Una simpatía por la presión que es compartida por Stefansson. Conocido por su bravura, ya sea para frenar a su par o para intentar una entrada a canasta kamikaze contra toda la defensa rival, el nórdico no se arruga nunca. Por supuesto, tampoco en esta ocasión. “Beautiful game to play” -un partido bonito para jugar-, resumió en inglés. La filosofía necesaria antes de afrontar cualquier reto.