«Retazos de una Copa del Rey fantástica», por JC. Rivero
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Autor: JOSÉ CARLOS RIVERO
PRIMERO.- La Primera Jornada, la de las sorpresas. Caen el primero y el segundo de la Liga Regular.
El scouting, las trampas defensivas, la fé y el aprovechamiento mental de no tener la presión del favorito, desniveló la balanza a favor de los menos poderosos.
El lapsus de pizarra de Pascual y la genialidad de Aíto, declarando previamente que el favorito para ganar La Copa era el Valencia Basket, dos hechos sonados y especialmente remarcados.
SEGUNDO.-La Segunda Jornada, la de los favoritos avisados. Fuenlabrada con un Jota Cuspinera mermado, no pudo hacerle demasiadas cosquillas a un Real Madrid serio y mentalizado.
La otra eliminatoria, muy igualada, tensa, muy tensa, de final dramático para los de casa y de suspiro hondo para los de Vitoria. Los dos tiros libres de final de partido del Obradoiro, ejecutados por el tirador con mejores porcentajes de la Liga desde 4,60, tuvo un desenlace demasiado cruel. Tira primero y falla, queda corto, se le encoge la mano. Tira segundo a fallar y lo mete a tabla. Jugadas que marcan para toda la vida…
TERCERO Semifinales, apasionantes! Triunfo histórico del Gran Canaria. Un Club que nació en un Colegio y que paso a paso ha llegado a cotas nacionales e internacionales de valor incuestionable. Golpe definitivo de Aíto para que los que le admiramos desde siempre, ya le endiosemos definitivamente. Apariencia de hombre tranquilo, que siempre lo fue, transmite más que nunca ser una persona de ego equilibrado. Fue un innovador constante y ahora es fiel a su propio estilo. Su espectacular sentido común le convierten, para mí, en el indiscutible nombre propio de esta edición de La Copa.
CUARTO La Final, con favorito claro, pero…, enorme e increíble Gran Canaria. No se arrugó nunca, compitió hasta el final y desarrolló un trabajo digno de todo tipo de elogios. La primera parte fue de dominio blanco, cargando el rebote ofensivo y jugando interior más de lo habitual. No obstante, marcador apretado. La segunda parte muy disputada también y cuando parecía que el Real Madrid ya había roto el partido, el equipo canario sacó fuerzas y orgullo, creando dudas y temor a su rival. Real Madrid definitivamente se llevó la Copa, pero el Gran Canaria se ganó el corazón de todos.