«No todo pie es pie», por Iván Díaz

«Una de las violaciones que suelen generar mayor discrepancias en las canchas, y da lo mismo la categoría que estemos arbitrando, es la Violación de Pie. Basta con que el balón de en algún lugar de la pierna del adversario, para que siempre haya algún jugador, entrenador o, sobre todo, algún espectador que lance en grito de «¡pie, pie!», a lo que siempre respondo que «no todo pie es pie».

Hay que recordar que ya se considera Violación de Pie cualquier parte de la pierna, no sólo lo que entendemos literalmente por pie, sin embargo, cuando se toca el balón con cualquier parte de la pierna de manera accidental no es Violación de Pie, es decir, que si el defensor después de un pase toca o corta el balón de manera involuntaria, no se debe sancionar como Violación.

Por tanto, lo que el árbitro debe de juzgar es la voluntariedad de interceptar ese pase para sancionar esa acción como violación, no si después de ese contacto con la pierna por parte del defensor, su equipo obtiene o no una ventaja inmerecida».