El Zaragoza se ejercitó en la semana de su parón liguero

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Exigente entrenamiento con el Recreativo Libolo

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El conjunto aragonés ha llevado a cabo un entrenamiento diferente en esta semana de descanso, con la disputa de un encuentro amistoso a puerta cerrada en el Príncipe Felipe frente al Recreativo do Libolo de Angola.

El choque ha servido a ambos conjuntos como una exigente prueba en el parón de sus respectivas competiciones. Por parte aragonesa, Casadevall repartido los minutos dando importancia y responsabilidad desde el inicio a los jugadores con menos carga de minutos. De igual forma, el choque ha servido para que la última pieza en llegar, Adas Juskevicius siga acumulando minutos de juego con sus compañeros y adaptándose a los sistemas del equipo, alternando las posiciones de base y escolta.

Tras perderse el encuentro de Vitoria, Miki Servera se ha reincorporado a la disciplina del equipo, tomando también mucho protagonismo durante el encuentro. Por el contrario, Martynas Gecevicius y Sergi García han presenciado el encuentro desde el banquillo tras proseguir con sus respectivas recuperaciones. Quien se lo ha perdido es Stephen Holt, que se encuentra en Estados Unidos por temas burocráticos. Para sustituirlos han estado presentes los jugadores del filial Vit Krejci y Joan Ferran Bernácer, quienes han tenido minutos junto con Simon Pursl.

El partido ha servido como broche a la semana de trabajo del equipo, que contará con tres jornadas de descanso antes de volver a los entrenamientos la próxima para continuar preparando el duelo de la decimoprimera jornada de la Liga Endesa, que le enfrentará al Iberostar Tenerife el próximo domingo 4 de diciembre en el pabellón Príncipe Felipe a las 12.30 horas.

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Descanso relativo para mantener el ritmo de competición

La jornada de descanso permitió al conjunto aragonés seguir trabajando en la recuperación de dos piezas importantes como Sergi García y Martynas Gecevicius, en una temporada en la que solo se afronta un partido por semana, este parón obligado no es plato de buen gusto para el Tecnyconta Zaragoza: “A mí no me gusta descansar. A los jugadores lo que nos gusta es competir y esta temporada con solo un partido las semanas ya se hacen demasiado largas”, reconoce el capitán Henk Norel.

En la misma línea se mantiene el técnico Andreu Casadevall: “No gusta nada para la competición y si hubiéramos tenido jugadores disponibles hubiéramos otro partido más”, reconoce ante las ausencias de los citados lesionados y de Holt, en Estados Unidos por temas burocráticos. Un choque cancelado en Madrid ante Movistar Estudiantes que se hubiera sumado al disputado ayer frente al C.R.D. Libolo. “Ha servido para mantener el ritmo competitivo, dosificar y ver la progresión de los jóvenes”, agradece.

No en vano, el júnior Joan Ferran Bernácer contó con 16 minutos de juego frente a los angoleños. De igual forma, ese reparto de protagonismo perseguía la mayor adaptación de jugadores como Kraljevic y Juskevicius, el último en llegar: “Filip ha jugado veintimuchos minutos y la pena ha sido Adas. Queríamos que jugase más de sus 19 minutos, pero no ha sido posible por problemas de faltas”, confiesa. Sin embargo, en la parte positiva ha estado la gran cantidad de presencia que han tenido jóvenes como Miki Servera y Jonathan Barreiro, ambos por encima también de la veintena. Un partido importante para mantener involucrados a todos los efectivos y mitigar el efecto de la ausencia de competición.