El Iberostar Tenerife se aferra a su liderato europeo
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La crónica en la web canarista
El Iberostar Tenerife sigue firme al frente del Grupo D de la Basketball Champions League, tras deshacerse este miércoles del Juventus Utena (79-57) en un partido que los aurinegros maduraron con cabeza para evitar cualquier tipo de sorpresa. No fue un día brillante en el triple (5/18), pero el grupo de Txus Vidorreta martilleó a su rival explotando las virtudes de sus interiores Vázquez, Bogris y Niang en distintos pasajes de un encuentro en el que los tinerfeños volvieron a demostrar su solidez defensiva.
Desde ahí, desde la fortaleza del colectivo atrás, no hubo rendija para que los lituanos pudieran opositar con claridad al triunfo. Y eso que el conjunto de Antanas Sireikas firmó una notable puesta en escena y aprovechó dos triples de Sirutavicius y Sulskis para intentar abrir brecha de entrada (5-10, 5’). La respuesta de los aurinegros fue contundente. Un parcial de 16-2, con Aaron Doornekamp sumando de tres en tres, bien con 2+1 o desde el 6,75, dio ya a los canaristas las riendas del encuentro (21-12, 9’).
Intentó jugar sus bazas el Juventus, con los rebotes ofensivos de Cepukaitis y las atalaya de centímetros de Galdikas, pero el Canarias ajustó bien su defensa y encontró un filón en los pick and roll y los balones interiores a sus hombres altos. El primero en marcar territorio fue Fran Vázquez, autor de nueve puntos en poco más de cinco minutos camino del descanso (39-28, 10’), incluidos varios mates espectaculares.
A la vuelta de la pausa, el equipo lituano hizo un amago con apretar el partido. Y de hecho redujo distancias hasta los cuatro puntos, tras un 2-9 de parcial (41-37, 23’). El caso es que su reacción tardó lo que el Iberostar Tenerife tardó en surtir de balones a Georgios Bogris. Movieron con fluidez la pelota los aurinegros y tiraron con criterio para ir abriendo brecha de manera progresiva, con un 15-3 de parcial (56-40).
El guión se repetiría después con Niang, que siguió el mismo camino que el resto de la batería interior de los anfitriones y se fue hasta los 12 puntos sin fallo, al tiempo que ponía en pie al público con varios tapones antológicos. Por el camino, el Iberostar Tenerife sacó a relucir una de sus principales señas de identidad, esa fortaleza defensiva que mengua considerablemente los porcentajes de acierto del rival y ofusca cualquier intento de agarrarse al partido.
En esa dinámica, el conjunto insular disfrutó también de los mejores minutos desde su reciente llegada de Taqwa Piñero. El estadounidense, cada vez mejor adaptado al engranaje aurinegro en ataque (27 asistencias del grupo), dejó además evidencias de sus buenas maneras atrás; por lo que amén de ver aro (14 puntos), contribuyó con un par de robos y un gran trabajo defensivo. Escenario pues idóneo para que el Iberostar Tenerife acabara brindando una nueva alegría a su afición y se fuera al mini parón navideño con su octava alegría europea del curso y líder en solitario del Grupo D.