Elegido presidente por aclamación en el último congreso de los Jóvenes de Coalición Canaria (CC) celebrado en La Laguna, Abel Morales (Arico, 1980) remarca que la ilusión y el fin de su formación es lograr la soberanía del Archipiélago, pero precisa que, primero, debe conciencienciarse el pueblo, "y para eso queda mucho".

-¿Cómo asume la presidencia de los jóvenes de CC?

-Con la mayor de las responsabilidades e ilusiones, y con un compromiso fuerte de trabajo. Los jóvenes de CC estamos marcando un paso importante dentro de la organización, generando debate, y hemos asumido unas cuotas de representación dentro de los órganos, importante. Del congreso me quedo con la apuesta que estamos haciendo al contar con un equipo directivo de Canarias, no con una representación insular, sino en pro del entendimiento de las Islas como una tierra única.

-¿Se sienten escuchados los jóvenes dentro del partido?

-Totalmente. Después del último congreso nacional de Gran Canaria los jóvenes tenemos unas cuotas de representación bastante importantes que nos darán poder para, a la hora de tomar decisiones, tener fuerza en las votaciones.

-El nuevo consejo político lo forman jóvenes de varias Islas, sin embargo el problema del nacionalismo en Canarias ha sido la falta de unidad. ¿Cómo van a intentar combatir ese problema?

-No creo que haya un problema de unas islas con otras. Creo que en CC se están tomando las decisiones de una forma unánime, y con total consenso. En el anterior congreso -nacional- hicimos una autocrítica importante de la cual hemos tomado nota y creo que a partir de ahí CC está siendo más fresca que nunca, adoptando soluciones con mayor rapidez y fluidez que nunca. Aunque CC lo ha venido haciendo ahora, cada vez más, ha fortalecido el entender Canarias desde una sola perspectiva. Es cierto que los jóvenes de CC están dando un paso hasta cierto punto fuera del planteamiento que se sacó en el congreso regional, pero también nos corresponde a nosotros ser la punta de lanza en ese sentido. En esa línea, ya hemos iniciado conversaciones con las organizaciones juveniles de otros partidos nacionalistas en Canarias para dar un paso y sentarnos en una misma mesa. No creo que haya muchas diferencias entre unos y otros y los jóvenes tenemos la responsabilidad de ser punta de lanza y llegar a acuerdos y tomas de respuesta a los problemas que se encuentren.

-En este último congreso de los jóvenes, se habló claramente de soberanía y nación, sin embargo estos mismos conceptos generaron enorme polémica en el congreso regional. ¿No se aprecia cierta contradicción?

-No, no vemos polémica. Es lo que pensamos. La ponencia del congreso regional es la que se aprobó, ésa es la ideología del partido. Los jóvenes hemos entendido que debemos debatir ese tema y profundizar un poco más y discutirlo. Lo nuestro no es una ponencia ideológica. Nuestra ideología es la de CC. Nosotros hemos hecho una addenda sobre las reflexiones ideológicas que tuvieron lugar en ese congreso. Cuando hablamos de los términos de soberanía e independencia hay que contextualizar. Entender la soberanía como una meta a corto plazo, pues no. Es nuestra ilusión, nuestro fin. Entendemos que con la independencia -cuando llegue el momento-, no será CC la que diga que va a ser así, sino que se hará cuando haya una conciencia de los ciudadanos que pidan eso, pero para eso nos queda mucho. Coalición, en sus años de gobierno, ha dado muestra de trabajo y de evolución de la sociedad canaria, pero nos queda mucho por hacer. Ojalá lleguemos a la independencia en ese sentido, pero llegaremos cuando seamos lo más autosuficientes posible. Hoy por hoy hay que seguir trabajando en ese sentido, tener esos argumentos de independencia, porque a todos nos gustaría ser lo más independientes posible.

-¿Cree que esa falta de conciencia nacional que hay en las Islas es lo que motiva el miedo a hablar de estos términos?

-He recibido multitud de llamadas después del congreso de gente que dice que estamos en el buen camino. La gente quiere que a Canarias se le respete, eso es lo que está buscando, pero con respeto, sin radicalismos. No vamos a tener una kale borroka, porque no va con lo nuestro. Lo nuestro es un nacionalismo integrador, moderno y europeísta, que lo que intenta es buscar las mejores soluciones para Canarias. No es más. No hay que filosofar, hay que hacer un nacionalismo práctico.

-A CC se le ha acusado de no actuar con contundencia con el Estado en temas como la financiación autonómica. ¿Reconoce esta debilidad?

-Contundencia la ha tenido. CC ha pedido la financiación. De hecho, el Gobierno canario la tiene cuantificada, y ahora lo quiere hacer también con los cabildos y ayuntamientos. Lo que hay que hacer ahí es otra lectura, y es que el PSOE se la da a los suyos. Se la dio a Andalucía ante de que se fuera Manuel Chávez, y ahora Chávez se ha bajado los pantalones con Cataluña. Desde luego, los socialistas canarios no han puesto sobre la mesa nada, ni han hecho absolutamente nada para hablar de este tema. Hoy por hoy hemos sacado las medidas anticrisis para las Islas porque necesitan los dos votos de los diputados de CC, no porque los socialistas sean conscientes. De eso es de lo que tienen que ser conscientes los canarios.

-Por cierto, ¿qué opina de la iniciativa para rebajar los topes electorales anunciada hace algunos días por el PSC?

-Me parece una iniciativa simplista. Algunos la califican de clara, pero creo que si vamos a hablar de reforma de la ley electoral hay que hacerlo de su totalidad. Lo que no se puede hacer es una propuesta que es un párrafo que simplemente aporta la reducción de los topes, pero que deja cerradas, según la lectura del preámbulo, determinadas modificaciones posteriores. Hay que ser serio cuando se habla y cuando se toman las decisiones. Creo que es necesario hacer un debate amplio, pero también hay que hacer otra lectura: el PSC ha optado por negociar esto fuera del Estatuto de Autonomía. ¿Qué es más importante, el Estatuto o la reforma electoral? Vamos a sacar el Estatuto, porque no es que lo haya retirado CC, sino que lo pararon ellos en el Congreso. En el Estatuto había una propuesta aceptada por todos. Los que modifican según su conveniencia son ellos, no nosotros, que, no obstante, estamos dispuestos a sentarnos y hablar de este tema cuando quieran y con quien quieran.

-Por último, ¿qué van a hacer los jóvenes para intentar detener la sangría de votos que se pierden en Gran Canaria?

-Se va a hacer un trabajo muy a pie de calle, serio, comprometido y muy de base.