Las comunidades autónomas no han respondido a la llamada de auxilio lanzada por Canarias para que manifestaran su solidaridad en la acogida de menores extranjeros que llegan en cayuco y la muestra de ello es que en los cinco primeros meses del año 2009 sólo han salido 24 chicos, a Valencia, Extremadura y Murcia.

La consejera de Bienestar Social del Ejecutivo canario, Inés Rojas, convocó a todas las comunidades españolas, el pasado mes de diciembre, para que pudieran ver de primera mano cómo se encontraban los niños de los cayucos y pretendía sensibilizar a los responsables de los asuntos sociales de las regiones españolas, con el fin de moverles a que se decidieran a "compartir" lo que supone proporcionar un buen futuro a los cientos de adolescentes que se han jugado la vida en la travesía desde África, precisamente para poder ayudar a la familia que han dejado en su lugar de origen.

Pero la respuesta ha sido más negativa de la esperada. Sólo Valencia, Extremadura y Murcia han respondido de forma afirmativa. Es un gesto que se agradece, pero no resuelve, ni de lejos, las expectativas de la Consejería.

Bajo la tutela de Canarias

Además, estos 24 menores africanos que se han desplazado hasta las tres comunidades citadas siguen permaneciendo bajo la tutela del Gobierno canario. Tampoco era esta la propuesta inicial, aunque Canarias lo acepta, porque ya son 183 los menores del vecino continente que se encuentran en distintas comunidades españolas, después de haber llegado a las costas canarias en cayuco.

La verdadera preocupación no estriba en su acogida y mantenimiento, que se está llevando a cabo con esfuerzo y sin problemas, sino en el futuro inmediato que se plantea para cada uno de esos chicos cuando cumplen los 18 años, máxime teniendo en cuenta que el Gobierno central les entrega un permiso de residencia en España que caduca el día de su mayoría de edad.

Si el pasado mes de diciembre eran 1.500 los niños africanos acogidos en el Archipiélago y a fecha 18 de mayo el número ascendía a 1.228, es de suponer que, descontando los 24 acogidos por las tres comunidades citadas, los 272 restantes habrán cumplido los 18 años en este período de tiempo. Estos números no contemplan los menores de las expediciones clandestinas que han llegado en los últimos seis meses a las costas canarias, aproximadamente un centenar.

Canarias también propone que la reforma de la Ley de Extranjería, todavía en estudio, contemple algunas modificaciones en relación con los menores.