Las becas no pueden potenciar la desigualdad. La consejera de Educación del Gobierno canario, Milagros Luis Brito, se reunió ayer con el secretario general de Universidades, Màrius Rubiralta, para defender este argumento, con el que el Ejecutivo regional se opone al proyecto del Ministerio de redistribuir las becas en función de los niveles de renta de la comunidad autónoma donde resida el estudiante que las reciba.

"Las becas no se dan a universidades, islas, provincias o regiones, sino a personas, residan donde residan. Midamos la renta familiar y los méritos académicos", indicó Luis Brito tras su encuentro con Rubiralta.

Cuestionada sobre la posible inconstitucionalidad de los planes del Gobierno central en este sentido, la consejera admitió que su departamento no ha realizado un análisis jurídico que permita asegurarlo, pero sí señaló que "políticamente no es admisible".

"Con estos baremos (los que baraja el Ministerio), puede ser que Cataluña tenga cinco veces más oportunidades que Canarias" en el acceso a las becas, dijo. En este sentido, cree que esta iniciativa es especialmente inoportuna en momentos como los actuales, cuando más de 100.000 familias del Archipiélago tienen a todos sus miembros en paro. "Ahora es cuando más hay que favorecer la equidad y la igualdad de oportunidades", dijo Milagros Luis.

Revisión general

La Consejería de Educación cree necesario una revisión general de los criterios para la concesión de becas. Así, puso como ejemplo los que se refieren a las distancias. "Se incentivan las superiores a cincuenta kilómetros. Eso en Madrid está bien, porque tiene varias universidades, pero en Canarias ese criterio no sirve", explicó Milagros Luis, quien, no obstante, considera que el documento del Ejecutivo central contiene aspectos "positivos", como la inclusión de "distintos tipos de becas".

Durante el encuentro, la consejera canaria planteó a Màrius Rubiralta la necesidad de que la Comunidad Autónoma vea reconocidas sus singularidades -lejanía e insularidad- en el documento de financiación. En este punto, Luis Brito se comprometió a trasladar al Ministerio información que justifique estos aspectos. Es el caso de las dificultades de movilidad, que en las Islas presentan características que no se dan en otras regiones.

Asimismo, la consejera de Educación valoró la disposición del secretario general al diálogo, que se comprometió a continuar trabajando y a estudiar las reclamaciones de Canarias. Una muestra de esta actitud "positiva" es que la reunión de ayer se produjo sólo tres días después de la Conferencia General de Política Universitaria, en la que Milagros Luis transmitió al ministro Ángel Gabilondo la preocupación del Gobierno regional y del Consejo Universitario de Canarias por el proyecto de distribuir las becas en función de la renta de la Comunidad Autónoma. Se trata, insistió, del primer "encuentro bilateral" entre ambas administraciones para analizar los contenidos del documento de financiación universitaria que afectan al Archipiélago.

Las discrepancias del Ejecutivo autónomo se centran esencialmente en las becas y en lo que atañe a la movilidad, dado que, por lo demás, el documento es "muy interesante", ya que persigue "conformar un sistema universitario eficiente y reforzar su carácter de servicio público" y también "es bueno para las universidades canarias", apostilló Milagros Luis Brito.