"Hay indicios, pero nada que asegure que Canarias ya sufre el cambio climático", de esta manera tajante se expresó el director del Centro Territorial de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) para la provincia de Santa Cruz de Tenerife, Víctor Quintero, al ser preguntado sobre si con el análisis de los datos obtenidos durante todo 2009 confirman cambios significativos del clima de las Islas.

"Los modelos que hemos obtenido durante el año pasado reflejan anomalías tanto en las temperaturas como en las precipitaciones, pero son valores que se distancian muy poco de los normales, entendiendo estos como los obtenidos tras la observación y registro de todos los fenómenos meteorológicos acaecidos entre 1971 y el año 2000", explica.

Así, si se observan los mapas significativos de temperaturas (ver pagina 22) se puede comprobar que las variaciones térmicas al alza son notables sólo en algunos puntos de la vertiente oeste de La Palma, la cara este de Tenerife y en toda la isla de La Gomera, mientras que en el resto de las zonas son a la baja, es decir, más frías, salvo en Lanzarote y Fuerteventura, donde se mantienen dentro de la norma sin grandes oscilaciones.

"Lo que sucede en La Gomera, en donde hay un aumento de hasta dos grados centígrados, es lo mismo que pasa en el oeste de Tenerife y el este de La Palma por una cuestión de "apantallamiento de aire". Como está en medio le afecta esa corriente de aire caliente. Sin embargo, en El Hierro no pasa porque está lejos de esta influencia y los valores obtenidos son algo más frío".

Ante esto, Quintero afirma que "la teoría de que los veranos son cada vez más cálidos no se sustenta de momento con datos, porque hay mucha dispersión de datos entre islas o incluso dentro una sola, como es el caso de Tenerife, donde el oeste está por encima de los valores normales y en el este son normales o más fríos, lo que no nos permite hablar de un fenómeno global".

A juicio de Quintero, "el diagnóstico meteorológico de 2009 es que fue un año que se aleja de la teoría de que van a aumentar las temperaturas de forma lineal, porque hay muchos puntos en los que hay bajadas significativas. Puede ser que ahora se recuperen y, de hecho, este último enero y febrero han sido extremadamente cálidos en las Islas, pero mientras haya esta dispersión en el comportamiento térmico, lo que viene a demostrar es que el procedimiento de calentamiento no es lineal y que depende mucho de factores locales que aún no son generalizados".

No obstante, el responsable de la Aemet en la provincia tinerfeña no niega que exista el cambio climático y que Canarias se pueda ver afectada por él.

"Aún no se puede asegurar nada, pero eso no quita que haya tendencias que efectivamente indican que hay cambios. Por ejemplo, las precipitaciones recogidas pueden ser las mismas, pero antes había lluvias más suaves y continuas y ahora son más intensas y concentradas", y añade que "lo que pasa es que, aunque haya variaciones, eso por sí sólo no significa nada, porque lo que hay que ver es si se repiten durante más tiempo y si siguen en aumento. Necesitamos 30 años más de datos para afirmar que el valor normal que se obtiene es superior en todos los sitios al valor normal de la anterior medición de tres décadas. Los valores medios suben y eso se ve, pero no son más que una tendencia, un indicio", sentencia.