El presidente canario, Paulino Rivero, dijo hoy que no se pueden "tirar por la borda" los esfuerzos para mejorar la competitividad y la calidad en el turismo en función "del color político" del Gobierno central, por lo que los acuerdos alcanzados en Madrid ayudarán a conseguir estos objetivos.
Así lo manifestó el jefe del Ejecutivo regional durante el discurso que pronunció tras la toma de posesión de Ricardo Fernández de la Puente como viceconsejero de Turismo del Gobierno autonómico, así como de otros responsables del departamento.
Paulino Rivero reflexionó "desde el pragmatismo" sobre que la mejora de la competitividad turística de Canarias en asuntos como la bonificación de las tasas aéreas no puede estar condicionada "a ver quién es el que gobierna en Madrid".
"¿Como se va a tirar por la borda por razones de tipo político y que en función del color que sea diga que no me interesa apoyarlo? Si antepongo eso no consigo el objetivo estratégico, que es muy importante porque hablamos de cosas muy sensibles, como la oportunidad de mejorar la ocupación", añadió.
El presidente canario argumentó que Canarias no puede renunciar a los 42 millones de euros para mejorar las infraestructuras turísticas ni se puede renunciar "bajo ningún concepto" a explorar todas las posibilidades de la llamada "quinta libertad", la posibilidad de que hagan escala en Canarias aviones en tránsito hacia África y América.
Agregó Rivero que la decisión de asignar el área de turismo a Presidencia del Gobierno, tras la remodelación provocada por la salida del PP, tiene como objetivo que esta materia sea "un eje transversal" y que los distintos departamentos del Ejecutivo aborden esta cuestión "para que tire del resto de la economía".
"Sabemos lo que debemos hacer para mejorar la competitividad y hay que hacerlo cuanto antes, pero también hay que ver cómo se hace", dijo Rivero, quien insistió en abordar "el reto de la renovación y la rehabilitación", lo que a su vez incentivará al sector de la construcción.
Añadió que la política en materia de turismo "será del máximo diálogo hasta el último segundo y con la máxima participación del sector", aunque "las decisiones las tomará el que las debe tomar, el Gobierno".
De esta manera se pretende "generar confianza y que se diluyan las incertidumbres", agregó el presidente canario.
Rivero abogó además por abrir "nuevas vías" para explorar mercados "emergentes" y señaló que el Gobierno regional va a apostar "fuerte" por las aerolíneas que quieran utilizar Canarias como base para nuevos destinos.
El objetivo es traer a Canarias un millón más de turistas, lo que a su juicio generaría 1.500 millones de euros y crearía unos 35.000 empleos.
También insistió en la necesidad de hacer "pedagogía" sobre la importancia del turismo como sector estratégico en Canarias ya que, alertó, "en atención" al visitante "nos están ganando otros destinos", por lo que pidió no caer en el derrotismo pero también tener la certeza de que "es hora de dar un nuevo impulso" al sector.
Paulino Rivero expresó además "su recuerdo y agradecimiento" a los anteriores responsables de la Consejería de Turismo y en concreto, señaló que la ex titular del departamento, Rita Martín, hizo "un buen trabajo" y su equipo contó con todo el apoyo del presidente independientemente de los aciertos y desaciertos.