CCOO y UGT denunciaron ayer que los Presupuestos de la Comunidad Autónoma para 2011 supondrán una pérdida de empleo y de derechos sociales y pidieron al Gobierno de Canarias que suba los impuestos como forma de incrementar los ingresos, al tiempo que anunciaron movilizaciones.

Los secretarios generales de UGT y CCOO, Juan Francisco Fonte y Juan Jesús Arteaga Lorenzo, aseguraron durante una rueda de prensa que los recortes previstos en los Presupuestos afectarán no sólo a los empleados públicos sino también a numerosos empleos relacionados con la Administración.

A su juicio, se trata de unas cuentas de "marcado carácter antisocial" que no permitirán afrontar la crisis económica actual y profundizará sus aspectos negativos.

A pesar de que el desempleo es uno de los principales problemas de Canarias y afecta al 30 por ciento de la población activa, los Presupuestos se centran en una reducción del déficit público, sin impulsar medidas que permitan reactivar la economía, aseguró Arteaga.

Las cuentas incluyen también un recorte de los derechos sociales y suponen un ataque a los sindicatos, pues la intención del Gobierno de Canarias es debilitar el movimiento sindical, según Fonte.

Ambos sindicatos consideran que el Ejecutivo canario tiene margen de actuación para actuar y reducir el volumen y los efectos de la reducción del gasto.

En su opinión, se deberían incrementar algunos impuestos, como los que afectan al tabaco y a la gasolina, además de elevar el tramo autonómico del IRPF para las rentas superiores a 120.000 euros, tal como han hecho otras comunidades autónomas.

Igualmente, sería conveniente instaurar "un impuesto selectivo", que permitiría mantener el empleo y los servicios sociales, y tratar de recuperar el impuesto de sucesiones, indicó Fonte. Con el fin de exigir que se mantengan los derechos sociales, los sindicatos han convocado diversas movilizaciones antes del 1 de diciembre próximo, fecha tope para presentar enmiendas a los Presupuestos Autonómicos, y convocarán una concentración el 30 de noviembre.

Para ambos representantes sindicales, es necesario que los trabajadores luchen por sus derechos y apoyen las movilizaciones con el fin de que los sacrificios económicos se repartan de la manera más equitativa posible, dijo Arteaga.

El representante de CCOO denunció asimismo el ataque al diálogo social por parte del Gobierno de Canarias, que vulnera unilateralmente acuerdos alcanzados a través de la negociación colectiva, como el convenio de personal laboral, algo que, según aseguró, es inconstitucional.

Igualmente, se prevé un recorte de los derechos sindicales de los representantes de los trabajadores, lo que redundará en una pérdida de los derechos laborales de todos los canarios.

En la misma línea que UGT y CCOO se pronunciaron desde Intersindical Canaria, formación que ha convocado movilizaciones en todas las islas para el 18 de noviembre en protesta contra el que considera "delirante" decreto de medidas extraordinarias para la reducción del gasto "y otros recortes sociales" aprobado por el Gobierno de Canarias.

IC afirmó que el Gobierno regional "ha entrado en un estado demencial" al crear "de hecho" las condiciones objetivas "para una situación de conflagración laboral global de peligrosas consecuencias sociales".

Añadió que ante la gravedad de la situación laboral y social las organizaciones sindicales deberían convocar "una huelga general canaria" de alcance al sector público y privado.

De hecho, entiende que la inexistencia de una respuesta social es la que ha animado primero al Gobierno español y ahora al canario "a estos y nuevos salvajes recortes sociales y laborales"

Rechazo del Gobierno

Por su parte, el portavoz del Ejecutivo canario, Martín Marrero, insistió en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno en que la postura del gabinete regional es la expuesta en el proyecto de ley de presupuestos, esto es, "no subir los impuestos", y remarcó que esta ha sido "la voluntad expresa" del presidente Rivero.

"Esa es la postura del Gobierno, más allá de que haya alguien que piense que hay que subir impuestos", subrayó Marrero, quien remarcó que en la actual situación "cualquier subida impositiva implicaría una restricción de los márgenes de ahorro, y, por tanto, de movimientos económicos que son necesarios para continuar en la senda de la recuperación económica". "Sería contraproducente", sentenció el portavoz.

Los grupos de PP y CC ya han dejado claro que tampoco considerarán una subida de los impuestos en los próximos presupuestos, mientras que entre los socialistas gana peso la tesis de no intentarlo a través de las enmiendas, si bien la decisión definitiva la tomarán en los próximos días -en todo caso antes del 16 de este mes, plazo máximo para proponer correcciones al presupuesto-.