El ex secretario general del PSC-PSOE en Santa Cruz de Tenerife, José Manuel Corrales, ha pedido "más reflexión, serenidad, diálogo e inteligencia" para reconducir una situación dentro del partido que "se está enquistando por momentos", y ha incidido en que el "vodevil de defenestración y restitución" del portavoz del grupo municipal, José Ángel Martín, es sólo una prueba de que "cortando cabezas" no se resuelven los problemas internos del Partido Socialista Canario.
En una nota de prensa, José Manuel Corrales ha hecho hincapié en que la cohesión interna en el PSC-PSOE "no se logra a golpe de gestoras, sino tomando decisiones sensatas y ecuánimes". "En este sentido, parece que algunos se han movido por la improvisación o con grandes dosis de resentimiento precipitando los acontecimientos", apostilló.
En otro orden de cosas, el que fuera responsable del comité local del PSC-PSOE en la capital tinerfeña ha considerado "vergonzoso" que el alcalde de Santa Cruz, Miguel Zerolo, anuncie su retirada de la Alcaldía "vanagloriándose y congratulándose de haber contribuido a eliminar políticamente a Juan Fernando López Aguilar y a lo que él llama ''sector estalinista del PSOE'', que referencia en la agrupación local del Partido Socialista de Santa Cruz de Tenerife".
Para Corrales, "las palabras de resentimiento de Miguel Zerolo contra los socialistas nos llenan de orgullo porque de esta forma se visualiza que el PSC-PSOE de Santa Cruz en esta legislatura ha sido un muro de contención ante los desmanes protagonizados por el mal gobierno municipal".
"El régimen de ATI tiene derecho a proclamar a su sucesor, que será José Manuel Bermúdez, pero no tiene ningún derecho a interferir en la vida orgánica y política del PSC-PSOE y designar quién es un buen candidato socialista para ATI y cuál no lo es porque solamente están pensando en sus intereses electorales y políticos", remarcó el política socialista, quien ha incidido en que "la campaña desatada por los medios afines a CC contra el PSC-PSOE de Santa Cruz sólo tiene como explicación la posibilidad real de que se abriese paso el cambio político en la ciudad, algo a lo que no estaba dispuesto a consentir quienes defienden al régimen".
El ex secretario socialista dijo sentirse "orgulloso" de no ser un dirigente político "cómodo para el régimen y para ATI", porque serlo supone "una complicidad inasumible para una persona progresista, de izquierdas o mínimamente decente". "El trabajo durante estos casi 40 meses de los socialistas de Santa Cruz ha estado centrado en desarrollar un proyecto con vocación mayoritaria, con una propuesta política distinguible y diferenciada, con perfiles nítidamente progresistas, y que plantee sin ambages la necesaria regeneración democrática en Santa Cruz de Tenerife y en Canarias", concluyó.