El consejero de Agricultura, Ganadería, Pesca y Medio Ambiente, Domingo Berriel, ha resaltado que Canarias cuenta en estos momentos con 142 espacios protegidos, a los que se suman los cuatro Parques Nacionales, que constituyen más del 40 por ciento de la superficie del archipiélago.

Así lo ha aseverado en una comparecencia parlamentaria, instada por el Grupo Socialista a través de la diputada Guacimara Medina, sobre la gestión del suelo para la protección de la biodiversidad y lucha contra el cambio climático.

En su intervención, el consejero señaló que la preservación de la biodiversidad es un objetivo de las políticas de desarrollo sostenible en cualquier sociedad, una finalidad aún más importante en Canarias, toda vez que cuenta con 3.600 especies y 600 subespecies entre plantas, algas, hongos y animales.

Es por ello por lo que, indicó Berriel, surge la Ley de ordenación del territorio y espacios naturales de Canarias, que estableció como primer criterio que los poderes públicos orientaran sus políticas de actuación en relación con la ordenación de los recursos naturales para la preservación de la biodiversidad y la defensa de la integridad de los ambientes naturales que perviven en las islas.

Uno de los objetivos de la presente legislatura, según el consejero, es que todos los espacios protegidos de Canarias contasen con su correspondiente instrumento de ordenación y gestión adaptado al marco jurídico actual. De hecho, 126 de los espacios protegidos ya poseen este instrumento.

Asimismo, si la Red Canaria de Espacios Naturales Protegidos abarca el 40,6% de la superficie canaria, la Red Natura 2000 constituye actualmente el 46,8%. Según Berriel, "hemos culminado 123 expedientes y en estos momentos tenemos 95 más en trámite".

En cuanto a la lucha contra el cambio climático, concluyó diciendo que el Gobierno viene desarrollando distintos programas a través de la Estrategia Canaria contra el Cambio Climático, con una inversión de 86,4 millones desde el periodo 2007 al periodo 2010.

OBJETIVO EN SÍ MISMO

La protección de nuestra biodiversidad, según el diputado Jorge Blanco, debe ser "un objetivo en sí mismo", toda vez que el 40% del territorio canario tiene algún grado de protección, siendo éste el "mejor ejemplo" de que las administraciones públicas "están apostando por mantener la biodiversidad en las mejores condiciones posibles".

En cuanto a la elaboración de los planes rectores por parte de los técnicos de la Consejería, Jorge Blanco planteó como recomendación que estos textos no se conviertan en "tesis doctorales" porque "al final serán inaplicables".

Mientras, el diputado nacionalista José Miguel González consideró que circunscribir en Canarias el cambio climático a los espacios protegidos es "erróneo", proponiendo al respecto un cambio de mentalidad en la población y de perspectiva, dado que uno de los factores más contaminantes en las islas es precisamente el uso abusivo de los medios de transporte privado.

Al mismo tiempo, abogó por mirar también al turismo, a quien, en su opinión, también hay que darle unas "perspectivas medioambientalistas".

Finalmente, por parte del PSC-PSOE, la diputada Guacimara Medina dijo que el daño a la diversidad biológica afecta a Canarias culturalmente, por eso consideró fundamental todos aquellos acuerdos relacionados con la conservación, así como que las comunidades autónomas apoyen prácticas de utilización del suelo para impedir la pérdida de la biodiversidad, poniéndola en relación con los recursos hídricos y los hábitats, contribuyendo así a la preservación del Medio Ambiente.