La asociación Jueces para la Democracia (JpD) ha defendido que la independencia de la jueza de Instrucción número 8 de las Palmas de Gran Canaria, Victoria Rosell, está "sobradamente demostrada" al tiempo que ha exigido el cese de la campaña de "ataques intolerables" lanzada contra ella.

Jueces para la Democracia ha expresado en un comunicado su solidaridad con la jueza, contra quien el Partido Popular ha presentado este lunes una denuncia ante el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) por haber presuntamente intervenido en la querella presentada en su día contra el presidente del partido en Canarias, José Manuel Soria, que dio lugar la denominado ''caso Salmón'', ya archivado.

La asociación ha subrayado que los ataques "no podrán mermar" el "compromiso personal con la independencia judicial" mostrado por Rosell y ha advertido de que el respeto a la actuación de los órganos judiciales es "imprescindible" para el ejercicio de sus funciones, entre las que se encuentra la "lucha contra la delincuencia vinculada con el ejercicio de cargos públicos".

ATAQUES FRECUENTES EN CASOS DE CORRUPCIÓN POLÍTICA

"Esta situación es lamentablemente frecuente en el ámbito de la investigación de delitos relacionados con la corrupción, especialmente de los partidos políticos", censura JpD, que critica el interés en obstaculizar este tipo de investigaciones con el fin de "anular la posibilidad de control democrático sobre la actuación del poder político".

En este contexto, ha criticado las "injerencias" que Rosell está sufriendo en su vida privada mediante "campañas sistemáticas exclusivamente destinadas a su deslegitimación personal" para influir en el curso del proceso. Para JpD, esta "durísima campaña mediática" somete la vida personal de la jueza a un "escrutinio público intolerable e inquisitorial" que parte además de "datos falsos o tergiversados".

Por último, Jueces para la Democracia ha hecho hincapié que la lucha contra la corrupción política exige respaldar a las instituciones judiciales encargadas de su persecución.