El Gobierno de Canarias expuso ayer su "preocupación" por la, a su juicio, "desnaturalización" de los debates generales que representa la organización de los tiempos acordados este lunes por la Junta de Portavoces.

La Junta, por mayoría - 4 diputados del PP y 2 del PSC-, acordó limitar los tiempos de intervención del presidente, Paulino Rivero, en el Debate de la Nacionalidad, un hecho que no se había producido hasta ahora.

Ante este hecho, el Ejecutivo remitió ayer a la Cámara una comunicación en la que se queja de esta decisión y en la que recuerda que los Reglamentos parlamentarios "tanto del Congreso, como de los distintos parlamentos autonómicos atribuyen al miembro del Ejecutivo turnos de palabra sin límite de tiempo, no sólo en las intervenciones iniciales, sino en las réplicas y dúplicas". Considera el Gobierno que la referencia al "equilibrio" en las intervenciones que se hace en el Reglamento del Parlamento sólo puede entenderse en el sentido de que la Presidencia de la Cámara tenga libertad para otorgar a los grupos el tiempo pertinente para equilibrar el que libremente haya utilizado el Gobierno.