El secretario general del PSOE y vicepresidente del Gobierno de Canarias, José Miguel Pérez, ha afirmado este miércoles que confía en la palabra de Paulino Rivero acerca del futuro del pacto de gobierno entre socialistas y nacionalistas a nivel regional.
Pérez reconoció que no tiene una "bola mágica" pero apuntó que el PSOE cumplirá su "compromiso" de tener "responsabilidad institucional" en el archipiélago. "Tenemos un gran peso político en el Gobierno, y si alguien está tentado de ir en otra dirección, que se olvide, creo en la palabra de las personas", indicó a las periodistas en un receso de la reunión de la Ejecutiva regional del partido reunida esta tarde en Santa Cruz de Tenerife.
Asimismo, calificó los resultados electorales del pasado domingo como una "derrota en toda regla" que les obliga a realizar un análisis "profundo y minucioso" para poder recuperar el apoyo del electorado. Por ello, indicó que el partido va a "tender la mano" a los sectores progresistas de las islas para generar "espacios de diálogo" que permitan mejorar las condiciones de vida de los ciudadanos.
No cree que la alianza con Coalición Canaria (CC) haya influido en el resultado electoral, más bien que se ha querido "refrendar en negro la marca de nuestro partido". Además, pidió "recuperar a los que no han estado" durante la campaña porque creían "que el partido necesitaba un repaso", y reconoció su responsabilidad en la derrota como secretario general. No obstante, dijo, "los militantes podrán expresarse en la etapa congresual que haremos en cadena".
"El partido sabe que cuenta conmigo para todo, pero creo que si hubiese habido otra persona al frente, mi impresión es que los resultados no habrían cambiado mucho", explicó.
Acerca del futuro del partido a nivel federal, dijo que le "encantaría" que Alfredo Pérez Rubalcaba "se presentara, pero aún no ha dicho nada, y la militancia socialista nominará entre las opciones que se presenten". "Mi opinión personal es inmejorable, y creo que sería un buen piloto para esta nave", sentenció.