La gestión público-privada de la Sanidad puede rebajar a la mitad los 1.600 euros de coste sanitario por habitante en España y ahorrar más de 13.000 millones anuales a este servicio público, de los que 618 corresponderían a Canarias, a través de fórmulas alternativas al copago.

Éstas son las estimaciones realizadas por la firma internacional de auditoría y asesoramiento legal Russell Bedford, que ha presentado hoy un estudio en el que propone nuevas fórmulas de gestión para el Sistema Nacional de Salud que supondrían una reducción del 25% sobre un presupuesto de 53.500 millones de euros.

Para conseguir este ahorro, que permitiría rebajar un 42% el déficit de 31.500 millones de euros registrado por las autonomías en 2011, sería necesario que la gestión de la Sanidad fuese privada mientras que la Administración mantendría la capacidad de control e inspección, así como la facultad normativa y sancionadora.

La primera de las medidas propuestas es la creación de una central de compras sanitaria privada, con la que la Administración ahorraría al menos un 20% en la adquisición de fármacos para centros hospitalarios.

Este sistema, que el Gobierno quiere promover en todas las autonomías, aliviaría la deuda de más de 15.000 millones de euros que el sistema sanitario tiene con sus proveedores.

En lo que respecta a la asistencia sanitaria, los presupuestos para 2012 reflejan un importante recorte del gasto por habitante, que en algunas comunidades supone hasta 200 euros menos respecto al comienzo de la crisis.

Para mantener el mismo nivel de prestación sin disminuir los recursos, Russell Bedford propone la gestión privada en ciertos servicios, como los de análisis de sangre, radiología, tratamiento de residuos, cocinas, limpieza y lavandería.

De este modo, sostiene que se conseguiría reducir a la mitad el coste sanitario por paciente en los hospitales públicos, que oscila entre los 1.100 y los 1.600 euros, dependiendo de la comunidad.

La tercera vía de ahorro consiste en revalorizar las infraestructuras sanitarias públicas que se iniciaron en la etapa de crecimiento económico y que, en la actualidad, "suponen un desembolso muy elevado que dificulta la asistencia de los pacientes en las mismas condiciones previas a la crisis".

La compañía cree que la puesta en valor de estas instalaciones se podría lograr cediendo el mantenimiento o explotación de hospitales a empresas privadas a través del cobro de un canon anual.

Los mayores ahorros en términos absolutos se conseguirían en aquellas comunidades que tienen un presupuesto sanitario más elevado. De este modo, a la cabeza se sitúan Andalucía, con 2.348 millones de euros, seguida de Cataluña (2.127), Madrid (1.792), Comunidad Valenciana (1.373), Galicia (883), Castilla y León (865) y País Vasco (849).

Por el contrario, los menores ahorros se localizarían en La Rioja (105 millones), Cantabria (183), Navarra (229), Baleares (297), Extremadura (370), Asturias (414) y Aragón (462). En una posición intermedia se situarían Murcia (464 millones) y Canarias (618). De Castilla-La Mancha no se dispone de datos porque todavía no ha presentado su presupuesto para 2012.

Sin embargo, el ahorro por habitante es un indicador más fiable de la efectividad de las medidas propuestas. De hecho, con este medidor el panorama cambia completamente al ser País Vasco la comunidad con un mayor ahorro (386 euros anuales), seguida de Asturias (383), Navarra (357), Aragón (355), La Rioja (349), Castilla y León (338) y Extremadura (336).

Por encima de los 297 euros de ahorro medio por habitante en España también se sitúan Galicia (315 euros), Murcia (309) y Cantabria (304).

No obstante, según este análisis, algunas de las CCAA más pobladas lograrían una menor eficiencia per cápita, como es el caso de la Comunidad Valenciana (269 euros), Baleares (270), Madrid (275), Andalucía (280), Cataluña (283) y Canarias (294).