Aunque el portavoz parlamentario de los nacionalistas canarios, José Miguel Barragán, teme que las Islas enfrentarán tras los recortes de las futuras cuentas estatales el escenario presupuestario "mas grave" de la historia autonómica, descarta con firmeza que vayan a producirse despidos entre los empleados públicos.

"En Canarias está garantizado el puesto de los empleados públicos y no se contempla la opción de despedir", afirmó.

Barragán admite que la incertidumbre de los presupuestos estatales -que incluirán recortes para todas las comunidades- mantiene en vilo a las Islas, pero defiende que aún así fue "bueno" aprobar las cuentas regionales para 2012, al contrario del criterio del PP regional, que consideró una "osadía" que el Ejecutivo autonómico contara con partidas sin conocer lo que iba a decidir el Gobierno central.

"En todo el país, 15 regiones -incluidas casi todas del PP excepto dos- también aprobaron sus presupuestos", replicó.

"Todas las autonomías hicieron los deberes, que era aprobar sus cuentas en función de los datos oficiales del Estado", explicó. "Si el Gobierno central cambia sus criterios unilateralmente el 30 de marzo, entonces tendremos que adaptarnos, pero no porque lo hayamos hecho mal, sino porque alguien cambió la ficha financiera por su cuenta", advierte.

Este escenario no preocupa demasiado a Barragán. "No sería la primera vez que pasa". La diferencia "es que ahora será el recorte más grave", matizó.