En el sur de Tenerife, más concretamente en Chimiche, la Fundación En Pie -fundación tutelar que desarrolla programas pioneros de calidad de vida, para personas con trastorno mental grave- ha seleccionado un espacio natural dedicado al turismo ecuestre, para desarrollar su oferta de actividades en la naturaleza.

Se trata de un enclave situado en la zona prácticamente desértica, donde se práctica la doma natural de caballo y se organizan excursiones que permiten disfrutar del singular paisaje sureño y de la práctica de esta ancestral actividad

La doma natural que se práctica con los equinos, alejada de las formas de entrenamiento convencionales, aporta unos animales de comportamiento equilibrado que se relacionan entre sí como una manada.

Estos animales representan una oportunidad para que cualquier persona se inicie en la práctica ecuestre, pero es especialmente adecuada para aquellos que tienen dificultades especiales, como las personas que padecen trastornos mentales graves.

La equitación representa una forma atractiva de terapia complementaria: lo más significativo es que el caballo no tiene "prejuicios", por lo que se relaciona con personas con discapacidad desde una perspectiva no contaminada, además de contribuir al mantenimiento del estado físico, puesto que la actividad mueve todos los músculos del cuerpo y a nivel neurológico se mejora la eficiencia de las señales que se envían al cerebro.

Esta práctica mejora aspectos psicológicos relevantes, como la autoestima, el autocontrol, la atención y la concentración.

El fin último que persigue la Fundación Tutelar En pie a través de sus programas de calidad de vida es aumentar el bienestar de las personas que están pasando por procesos de recuperación, desarrollando actividades que puedan compartir con cualquier persona de la comunidad, tenga una discapacidad o no.

Un trastorno mental grave es un conjunto de diagnósticos clínicos que entran en el grupo de las psicosis -fundamentalmente trastorno esquizofrénico y trastorno bipolar-, pero también otros diagnósticos relacionados.

Las personas con estos diagnósticos pueden ser consideradas como pertenecientes al grupo de los afectados por trastornos mentales graves.

De este modo se puede afirmar que no todas las personas que han sido diagnosticadas de una psicosis (como por ejemplo la esquizofrenia) entran en este grupo y que no todas las personas con trastorno mental grave padecen una esquizofrenia.

Los objetivos de la equinoterapia o hipoterapia es conseguir que los pacientes obtengan beneficios en diferentes áreas. Así, está demostrada su eficacia en la mejora de la autoestima y la confianza en sí mismo, de la memoria y la capacidad de prestar atención. Aumenta el vocabulario y mejorara la comunicación verbal. Fortalece la musculatura, mejorar el equilibrio y la coordinación.

Asimismo, sus beneficiarios aprenden a cuidar del caballo, dentro de sus posibilidades, se relacionan con personas diferentes de las de su entorno habitual, creando relaciones de amistad con sus compañeros y desarrollando el amor y respeto hacia el animal.

Todos estos beneficios se deben a que el caballo transmite unas 110 vibraciones por minuto que actúan sobre el sistema nervioso del paciente estimulándole y ayudándole a mejorar.

En ningún caso el objetivo de la equinoterapia es que el paciente aprenda a montar a caballo.

Al desarrollarse al aire libre la equinoterapia o hipoterapia consigue que el paciente disfrute del entorno. De esta forma, la terapia puede convertirse en una auténtica diversión.

Se debe tener en cuenta que la equinoterapia debe formar parte de un tratamiento integral que ayude al paciente en sus problemas, no debe contemplarse como una terapia aislada.