Las solicitudes de órdenes de protección por violencia de género descendieron en el primer trimestre del presente año en un 12,4 por ciento (492) respecto al mismo periodo de 2011, según datos del Instituto Canario de Estadísticas (Istac). Pese a este dato, la realidad es que no ha bajado la violencia machista, si no que la crisis ha provocado un retraimiento por parte de las víctimas para querer romper con esa situación, tal y como demuestra el hecho de que se haya producido un aumento de las llamadas al Servicio de Atención a Mujeres Víctimas de Violencia de Género del 112.

Según explicó la directora general del Instituto Canario de Igualdad del Gobierno regional, Elena Mañes, la disminución que se ha registrado en los últimos años tanto de denuncias por violencia machista como de peticiones de órdenes de protección "no es real", sino que se debe al miedo de la víctima, en una situación económica como la actual, a quedarse en situación de desamparo.

"Muchas veces, las mujeres en situación de violencia llevan mucho tiempo alejadas del mercado laboral, por lo que tienen una dependencia económica, además de emocional, con respecto al maltratador, quien se aprovecha de ello constantemente. Con la situación actual, los agresores potencian este aspecto con frases del tipo: dónde vas a ir o qué vas a hacer como están las cosas. Así, la propia visión del panorama general, con esos mecanismos de control que se refuerzan a través de ese tipo de mensajes, hace que las mujeres en situación de violencia se mantengan durante más tiempo en esa situación", explicó Elena Mañes.

Y es que, según detalló la directora, las cifras de denuncias son la punta del iceberg, pues solo "reflejan la parte de la mujer que ha decidido romper la situación de violencia, pero sabemos que hay muchas mujeres en situación de violencia de género que todavía no han dado ese paso por múltiples circunstancias, entre ellas la dificultad de ser consciente de la situación que se está viviendo, que es algo muy complicado".

Más llamadas al 112

El número de llamadas que recibe el Servicio de Atención a Mujeres Víctimas de Violencia de Género del 112 del Gobierno de Canarias, que "no muestran una gran disminución".

Así, informó Mañes, en 2011 en este servicio telefónico de atención e información a mujeres se atendió a 7.255 mujeres en toda Canarias, mientras que en el periodo comprendido entre enero y mayo del presente año se habían registrado 4.991 llamadas. De esas llamadas, 1.273 hacían referencia a situaciones en las que había peligro para la vida de la mujer y 2.330 eran de urgencia.

Otro que refleja que los casos de violencia machista no han descendido es el publicado la semana pasada por el Instituto Canario de Estadística (Istac), que señala que en mayo del presente año en Canarias se realizaron 316 llamadas al 016, quince más que en el mismo mes de 2011.

Dada la situación que se está viviendo, la directora general del Instituto Canario de Igualdad hizo hincapié en la necesidad de mantener todos aquellos recursos que existen a disposición de las mujeres que están en situación de violencia de género.

"A pesar de esta coyuntura, se debe seguir animando a las víctimas de violencia machista a que se acerquen a los servicios especializados que existen para que reciban información y asesoramiento sobre los mecanismos que tienen a su alcance. La alternativa no es permanecer en una situación de violencia que puede acabar en asesinato. Por ello hay que romper esa relación y hacer uso de estos recursos", destacó Mañes.

Además, y en el sentido de la situación económica actual, recordó que el Servicio Canario de Empleo tiene como prioritario a la mujer víctima de violencia de género, y resaltó su intención de potenciar este tipo de iniciativas.

La directora del Instituto Canario de Igualdad también resaltó el importante papel de los medios de comunicación y de la sociedad para lanzar un mensaje de que "no somos cómplices y no miraremos para otro lado, si no que condenamos esta forma de violencia", sentenció Elena Mañes.