La delegada del Gobierno en Canarias, María del Carmen Hernández Bento, afirmó ayer que no se plantean modificar las líneas de investigación de las desapariciones de los niños grancanarios Sara Morales y Yéremi Vargas tras los nuevos informes forenses practicados en Córdoba que han determinado que los restos óseos hallados en una finca son de los hijos de José Bretón.

En declaraciones a los medios de comunicación, reconoció Hernández Bento que no se han "planteado nada", y que en su día, durante la investigación de restos óseos en el pozo de Jinámar, "se cometió un error y quedó claro".

"En ese momento yo no tenía responsabilidades pero fue un error grave porque se generaron expectativas y fue un fiasco, y hay que ser muy prudentes", comentó la delegada del Gobierno en Canarias.

En su opinión, "no es bueno" cuestionar las investigaciones y por un error no se pueden cuestionar todas.

"Hay que tener prudencia y sensatez y los errores de un espacio no son los mismos que en otro", explicó la delegada del Gobierno en Canarias, María del Carmen Hernández Bento.

El SUP pide revisión

Pese a la posición de la delegada del Gobierno en Canarias, el Sindicato Unificado de Policía (SUP) sugirió ayer la conveniencia de revisar las pruebas que se hicieron a los restos óseos encontrados en un pozo de Jinámar (Gran Canaria) en marzo de 2010, y que en su día se investigaron para saber si estaban relacionados o no con las desapariciones de Yeremi Vargas y Sara Morales.

Las pruebas realizadas a esos huesos, hallados mientras se buscaba a Sara Morales, determinaron que no se trataba de restos humanos, por lo que se descartó su conexión con las desapariciones de la joven de Las Palmas de Gran Canaria y del niño de Vecindario.

Sin embargo, el SUP se pregunta, "visto el error" cometido en el caso de la desaparición de los niños Ruth y José en Córdoba, si no sería necesario "revisar todos los restos óseos encontrados (en otras investigaciones) y que hayan sido descartados por cualquier servicio de policía científica de cualquier policía española o Instituto Forense, que aún estén localizados", y analizar de nuevo las pruebas periciales practicadas.

Además, recuerda los casos de Sara Morales y Yeremi Vargas y los análisis que se hicieron a los restos de Jinámar. Revisar esos estudios, argumenta el sindicato mayoritario en el Cuerpo Nacional de Policía, daría "tranquilidad a las familias de estas y otras personas desaparecidas".