Para los empresarios, los sindicatos y la banca la pregunta no es si habrá o no un adelanto del cierre presupuestario este año por parte del Ejecutivo autonómico, sino si será este mes o en octubre, porque también coinciden todos en que se producirá incluso antes que en ocasiones pasadas.

Como se recordará, la medida ya fue puesta en práctica en 2010, ejercicio en el que la Administración autonómica no aceptó nuevos compromisos de pago para el mes de diciembre, y el año pasado, que cerró en noviembre.

El adelanto supone en la práctica que la Administración no reconoce las deudas con los proveedores y otros acreedores del Gobierno que presenten sus facturas después de la fecha fijada -con algunas excepciones, como las nóminas del personal público-, pero siempre ha respetado las obligaciones contraídas con anterioridad.

Desde que el Parlamento aprobó la Ley de Medidas Administrativas y Fiscales el pasado mes de junio, que consagró un recorte presupuestario de 800 millones de euros que había sido anunciado meses antes por el propio Ejecutivo para poder cumplir con el objetivo del déficit de 2012, el "fantasma" de un cierre anticipado preocupa a empresarios, sindicatos y otros agentes económicos y sociales.

Pero el Ejecutivo autonómico viene desmintiendo desde entonces -incluso antes, cuando anticipó la necesidad de practicar un importante recorte a las cuentas regionales- que tenga en mente adelantar el cierre presupuestario o que sea una opción que maneje en estos momentos.

El pasado miércoles fue el presidente del Cabildo de Gran Canaria, José Miguel Bravo de Laguna, quien puso el asunto sobre la mesa cuando se mostró "alarmado" por la posibilidad de que un adelanto del cierre presupuestario "invalide" la ejecución de las cuentas de esa corporación insular este año.

Desde la patronal grancanaria, la Confederación Canaria de Empresarios (CCE), también se da por sentado que el Ejecutivo tendrá que adoptar esta medida, si bien advierten de que el cierre anticipado no podrá suponer el desconocimiento de las obligaciones presentadas antes de la fecha que se acuerde -como en efecto ha pasado en los ejercicios previos-.

En CCOO Canarias también ven inevitable que la Administración regional acuerde cerrar el gasto de forma anticipada. "Si ya había hecho los años anteriores, que el Ejecutivo no tuvo que afrontar los recortes de 2012, cómo no van a hacerlo ahora, que todavía tendrán que hacer más ajustes", explican.

Menos enfáticos se muestran desde Renta 4, al alertar de que es imposible conocer lo que hará el Gobierno, si bien matizan que el cierre adelantado es un escenario "muy probable" este año.