"Quien paga, manda". Con un viejo refrán español resume el portavoz de Comisiones Obreras (CCOO) en Canarias, Carmelo Jorge, el rechazo del sindicato a la financiación por parte de empresarios a los partidos políticos.
Defendida, aunque con la debida transparencia, este lunes, por el secretario general de Coalición Canaria (CC) en Tenerife, Fernando Clavijo, el sindicalista advierte de que si se quieren "partidos independientes, que se equivoquen solos", la financiación de estos tiene que ser "pública", "transparente" y en función del "número de votos obtenidos". "Así serían los ciudadanos los que financian a los partidos, por tanto los que más votos obtengan más dinero reciben", precisó Jorge.
Poco más o menos, el portavoz de CCOO coincide con el responsable de Organización de Izquierda Unida en Tenerife, Miguel Ángel Pérez, quien este lunes también abogó por que sea el Estado, en tanto que los partidos están al servicio de la ciudadanía, quien financie a los partidos.
Carmelo Jorge remarca que "se nos quiere hacer ver" que la corrupción es un problema de la política, cuando, en realidad es la "conexión" entre el mundo empresarial y el mundo político. "Si no hubiese alguien corrompiendo, no habría nadie corrupto", subraya.
Por ello, remarca Jorge que "no basta" con que se sea "transparente", porque siempre habrá cosas que no lo sean. "Cuando un banco cancela una deuda de un partido político lo está financiando -advierte-, y eso se ha hecho en todas las campañas electorales". "Eso es lo que hay que prohibir y perseguir, porque luego ese partido está vinculado a esa financiación", sentencia.
En esta línea, el secretario general de UGT en Canarias, Gustavo Santana, remarca que "cuanta más transparencia haya en la financiación de los partidos, mejor", sobre todo cuando se ha perdido mucha confianza.
Considera que se debe "legislar" sobre este aspecto, y ser "más contundentes" a la hora de saber cómo va asociada la financiación y las donaciones privadas. Y lo argumenta tras la "vinculación" de empresas de la construcción que, "casualmente", han tenido algunos réditos económicos en licitaciones y concursos. "Por eso hay que clarificar", concluye.