Poco importó que a su izquierda estuviera su compañera de partido y consejera regional de Empleo, Francisca Luengo. El presidente de la Fundación Ideas y exministro de Trabajo socialista, Jesús Caldera, advirtió ayer de que las Islas podrían acabar el año 2013 con 400.000 parados, de los que 200.000 no cobrarían ningún tipo de prestación por desempleo y en sus hogares no entraría ni un solo euro para subsistir.

Esta es una de las dramáticas conclusiones del informe sobre los efectos sobre los efectos de la "ideológica" reforma laboral aprobada por el PP, elaborado por la citada fundación y que Caldera presentó ayer en Tenerife. Junto a él comparecieron la mencionada consejera de Empleo, la directora general de Trabajo, Gloria Gutiérrez, y la diputada socialista Dolores Padrón.

A juicio del exministro del primer gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, "si no hay un cambio de política económica" y el Ejecutivo que preside Mariano Rajoy "no abandona la austeridad salvaje y extrema", las cifras seguirán siendo muy negativas. "Vamos hacia una auténtica economía de guerra, porque en el año 2010 el 72,2% de los desempleados canarios contaba con cobertura, cifra que bajó en 2012 hasta el 59% y si seguimos con las previsiones del propio Gobierno, podría caer hasta el 50% a final de este año", detalló. Caldera dijo que desde el Gobierno pretenden justificar la reforma laboral porque aporta fórmulas de flexibilidad interna para no tener que recurrir a los despidos.

Sin embargo, los efectos reales han sido no solo un aumento de las suspensiones de actividad y de las reducciones de jornada, sino también de los despidos, que se han acelerado.

En el caso de Canarias, la situación se agrava porque la tasa de paro supera el 34% y llega hasta el 69% en el caso del desempleo juvenil, apuntó. En el primer trimestre del año, recordó, se destruyeron 9.500 empleos en Canarias, tres veces más que en el primer trimestre de 2012, una aceleración que achacó a los efectos de la reforma laboral. "La crisis es la misma que en 2009 y la caída de la actividad económica es similar, pero la destrucción de empleo, como consecuencia en parte de la reforma laboral, se ha acelerado", lamentó.

En este sentido, Francisca Luengo definió la reforma laboral como "un ajuste de cuentas con el bienestar laboral". La consejera regional admitió que como responsable tiene escaso margen frente al desempleo, porque "si no se cambia la causa", es decir, la política del Ejecutivo central, "no se pueden solucionar los males".

Pese a ello, aseguró que el Gobierno regional no permanece "inactivo" y anunció un plan de acción social y laboral para afianzar las políticas activas de empleo y una estrategia de empleo juvenil centrada en la formación.

El PP pide aprovechar la oportunidad del déficit

El secretario general del PP canario, Asier Antona, valoró ayer la decisión del Gobierno de España de relajar el objetivo de déficit de las autonomías del 0,7 al 1,2% en 2013 y consideró que "esta relajación ofrece una oportunidad al Gobierno regional para aliviar los ajustes sociales y desplazar los esfuerzos al sector político y público de la Comunidad autónoma". Antona aseguró que "con esta reducción, Canarias ya cumple a 31 de diciembre de 2012 con el objetivo de déficit del año 2013, por lo que estamos en óptimas condiciones para afrontar este ejercicio sin necesidad de acudir a nuevos ajustes en el gasto social". "Esta medida de adecuación del déficit de las administraciones públicas acorde con la ampliación del objetivo de consolidación fiscal de España hasta el año 2016 es una magnífica noticia para autonomías como Canarias", señaló.