El carné por puntos que impuso el Estado a los pescadores al trasponer una normativa europea puede acarrear, en el peor de los casos, la pérdida de la licencia o la inhabilitación de los patrones de las embarcaciones. Tras dos meses de vigencia, los máximos representantes de la actividad en las Islas recelan de un sistema que no acaban de entender y echan en falta más firmeza contra el furtivismo.

El nuevo mecanismo, que refuerza de forma especial la penalización a las embarcaciones y pescadores que reincidan en los incumplimientos-, incluye 12 infracciones que suman los temidos puntos. Entre otros, no comunicar las capturas; emplear artes prohibidos; falsificar o disimular la matrícula o pruebas de una investigación; llevar pescado de talla inferior a la legal; operar en zonas -o tiempos- de veda -o de moratoria-; pescar sin licencia o permiso y obstruir inspecciones.

Desde los productores, el presidente de Islatuna, Vicente Rivero, apunta que tanto patrones como armadores están "un poco enfadados, pero es una imposición que tenemos ahí", señala con resignación.

El presidente de la Federación Provincial de Cofradías de Pescadores de Santa Cruz de Tenerife, Telesforo Manuel Díaz, "no ve" la necesidad del sistema porque la "gran" mayoría de los pescadores "va por la legalidad". Además, advierte, pocos conocen cómo funciona. "Yo lo quitaría".

"Creo que bastaría con vigilar más y perseguir a los que pescan fuera de temporada o por encima de lo autorizado", considera. Como Rivero, cree que los pescadores "ya saben" lo que tienen que hacer" y demanda que se combata más el furtivismo.

Por su parte, el presidente de la Federación Provincial de Cofradías de Pescadores de Las Palmas, Gabriel Jiménez "Vielo", admite de que hay "nervios" entre los pescadores ante las consecuencias del carné, pero tras reunirse con los responsables sectoriales se tranquilizó. "Nos aseguraron que la Unión Europea no tiene interés en quitarnos las licencias", explica. "Para perderla tiene que haber una infracción muy importante, pero es verdad que existe una preocupación por este asunto entre los pescadores", insiste.

En todo caso, Vielo tercia que el sistema ayudará a concienciar a quienes se dedican a la actividad de que hay que hacer las cosas "bien".

"Hasta ahora solo había sanciones, pero este sistema cohibirá al infractor habitual a seguir con sus prácticas por miedo a acumular los puntos", señala convencido. "Esperemos que no sea tan duro y negro como lo vimos al principio", vuelve a puntualizar.