El comité intercentros de Gesplan acusa al Gobierno de Canarias de querer "desmantelar" la empresa pública tras su ofrecimiento de suspensiones temporales de contrato, despidos incentivados, reducción salarial generalizada y modificación de determinados contratos a tiempo completo por otros a tiempo parcial.

Además, según los trabajadores, la empresa amenaza con la presentación de otro Expediente de Regulación de Empleo --sería el segundo tras el que el año pasado extinguió el contrato a 34 trabajadores y habilitó la posibilidad de suspender temporalmente a la mayor parte de los empleados-- en el caso de que no se llegase a ese acuerdo.

El objetivo es reducir la plantilla de los 133 trabajadores actuales, a 55 o 50, "o lo que es lo mismo, a despedir a unos 80 empleados, panorama que pone en peligro la viabilidad de la empresa", expone el comité en una nota.

Los trabajadores culpan de la actual situación de la sociedad al director-gerente, Rafael Castellano, y al propio Ejecutivo regional, que ha implantado un recorte "irracional e injustificable" de los servicios públicos que ha desembocado en una "pérdida de derechos" de los trabajadores del sector público.