La portavoz en materia de Igualdad del grupo Nacionalista Canario, Flora Marrero, ha considerado hoy que la crisis económica no puede ser una excusa para que se imponga un modelo de familia que no tiene nada que ver con el siglo XXI en referencia a la propuesta del Gobierno central de limitar la reproducción asistida.

Marrero, en un comunicado, indica que ha comenzado los contactos con colectivos de mujeres y LGTB de Canarias para analizar cómo se queda la situación y qué acciones se pueden llevar a cabo para evitar que los planes de la ministra de Sanidad, Ana Mato, sobre la reproducción asistida sean llevados a cabo.

"Voy a analizar todas las opciones posibles porque no podemos permitir que el Estado, una vez más, imponga su modelo de familia en contra, incluso, de lo dicho por el Tribunal Constitucional y la propia Carta Magna que promulga la igualdad por encima de cualquier otra cuestión", afirma Flora Marrero.

La diputada nacionalista entiende que el Gobierno de Mariano Rajoy ha hecho un "recorte brutal" de derechos en tan solo año y medio y advierte de "los que parece que pretende seguir haciendo a juzgar por lo que refleja la cartera común básica de servicios que presentará el Ministerio de Sanidad" a las comunidades autónomas.

"La crisis no puede ser excusa para imponer un modelo de Estado, otro de convivencia, otro de educación y, como no, otro de familia que nada tiene que ver con la sociedad del siglo XXI que hemos construido entre todos y todas" añade la nota.

Flora Marrero asegura que estudiará con todos los colectivos las medidas que se puedan llevar a cabo desde el Parlamento de Canarias para evitar "un atropello más a los derechos de las mujeres" y confía en que se sumen a ellas todos los grupos parlamentarios.

Según los datos que aporta, en Canarias durante el año pasado fueron casi 1.200 las mujeres que se beneficiaron de los tratamientos de fecundación in vitro y que de continuar el Ministerio con sus intenciones "no podrían ejercer sus derechos en igualdad de condiciones".

Flora Marrero también criticó el hecho de que se excluya de la posibilidad de acogerse a un tratamiento de fecundación in vitro a todas esas parejas que no han formalizado su relación y a las mujeres solteras que quieren ser madres.