El presidente del Cabildo de La Gomera, Casimiro Curbelo, ha resaltado este miércoles en rueda de prensa que los principales efectos causados por el temporal de viento y lluvia se centran en la agricultura y principalmente en el plátano, entre otros cultivos.

Por ello, ha anunciado que en los próximos días se llevará a cabo una evaluación del alcance de los daños, que en principio se centran en los municipios de Agulo, Hermigua, Valle Gran Rey y en La Dama en el sur de Vallehermoso, entre otros puntos.

"Este es un problema complicado que se repite cada vez que hay fuerte viento y ahora nos corresponde la tarea de evaluar su alcance", ha señalado. No obstante, ha subrayado que en general se puede hablar de normalidad, y ha expresado su deseo de que ocurra en las próximas horas en el resto de las islas, que se verán afectadas por la borrasca.

El operativo de seguridad sigue funcionando desde las tres de la tarde de este lunes, momento en el que se puso en marcha el Plan Insular de Emergencias y Protección Civil en consonancia con la alerta máxima decretada por el Gobierno de Canarias por fuertes lluvias y vientos.

El vicepresidente, Juan Alonso Herrera, y el consejero de Carreteras, Manuel Jesús Morales, permanecieron desde las 03.00 horas en el centro de emergencias para hacer un seguimiento a cómo se desarrollaban los acontecimientos.

Durante las últimas horas, el Cabildo ha dispuesto de un operativo cercano al medio centenar de personas y siete maquinarias pesadas cuya principal labor está siendo la de limpiar las vías insulares.

Al mediodía de este miércoles permanecían cerrados los dos caminos vecinales de Argaga y Arguamul, competencia de los ayuntamientos de Valle Gran Rey y Vallehermoso, por lo que serán estas corporaciones las que decidan sobre su reapertura.

"En La Gomera se puede hablar de normalidad y las carreteras se encuentran en plena operatividad", ha reiterado el presidente, quien relató ante los medios de comunicación que el grueso de los daños se debieron a los fuertes vientos que causaron desperfectos en el alumbrado o las señales de tráfico.

Las precipitaciones tampoco han resultado especialmente favorables para recargar las balsas y los acuíferos, y todavía sigue lejana la posibilidad de disponer de la totalidad de los cinco millones de metros cúbicos que pueden albergar las infraestructuras hidráulicas de la isla.

"Esperamos que el resto del invierno transcurra con normalidad y podamos contar con todos los recursos que somos capaces de almacenar", ha explicado.

COMUNICACIONES MARÍTIMAS

No ocurrió, por lo tanto, como en las lluvias de hace algunas fechas que sirvieron para recargar la presas de Izcagüe, Palacios y en menor medida la de Chejelipes, en el sur de la Isla.

En cuanto a las comunicaciones marítimas, Curbelo ha detallado que el martes sólo se suspendió un viaje de la naviera Armas, mientras que el transporte por carretera ha funcionado con plena normalidad.

El dispositivo de emergencias seguirá activado durante las próximas horas, si bien se considera que ya ha pasado el "grueso" de la alarma. Ahora, las tareas se centran en despejar las carreteras y actuar en cuanto se vuelvan a producir desprendimientos en las próximas horas, tal y como es previsible que ocurra.