El presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero, aseguró ayer que serán las familias y las empresas como consumidores de energía eléctrica las que van a pagar en sus facturas las consecuencias del "caos", el "desorden" y la "improvisación" del Gobierno de España en la reforma del sistema eléctrico.

Rivero afirmó que "los desaciertos" del ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, en la reforma eléctrica se reflejarán desde el 1 de enero con una nueva subida de los recibos de la luz que hará "más difícil" la vida a las familias y "restará competitividad" a las empresas.

El presidente se pronunció así en el pleno del Parlamento, en respuesta a preguntas de los diputados Román Rodríguez (NC) y Dolores Padrón (PSOE) sobre la decisión del Gobierno de España de eliminar de los presupuestos estatales de 2014 los 3.600 millones de euros previstos para contribuir a la eliminación del déficit tarifario.