El portavoz parlamentario de Nueva Canarias (NC), Román Rodríguez, pedirá a la Mesa del Parlamento la inclusión de la iniciativa legislativa del Cabildo de Gran Canaria para reformar la ley turística en alguno de los dos plenos del próximo mes de febrero. Rodríguez criticó al presidente del Gobierno de CC y el PSOE, Paulino Rivero, por apelar ahora al diálogo cuando sus grupos parlamentarios rechazaron, el pasado mes de mayo, las enmiendas de NC a la norma en vigor, incluidas después en la proposición de ley del Cabildo de Gran Canaria.
Después de que el Cabildo de Gran Canaria anunciara su intención de solicitar al presidente de la Cámara, Antonio Castro, la inclusión de la iniciativa para reformar la Ley de Renovación y Modernización Turística en los plenos de febrero, Román Rodríguez, en su condición de miembro de la Junta de Portavoces, hará lo propio el próximo 4 de febrero.
“Es imprescindible” que el Parlamento “vea ya” la proposición de ley de Gran Canaria porque se ha puesto en evidencia que la norma actual “responde a los intereses de algunos territorios y de alguna patronal”, denunció el diputado de NC.
Las presiones del presidente del Cabildo de Tenerife, Carlos Alonso, y el de la patronal tinerfeña Ashotel, Jorge Marichal, para frenar la iniciativa del Cabildo de Gran Canaria “les retrata como los verdaderos beneficiarios” de la ley, aseguró Rodríguez. Para el también presidente de NC demuestra que son “los autores intelectuales” de la ley, aprobada el pasado mes de mayo con la mayoría absoluta de CC y el PSOE.
Ante la posición de Alonso y Marichal, NC considera que “se pone en valor la necesidad de cambiar” la legislación para que “se respeten” los modelos territoriales insulares turísticos y se crezca en plazas alojativas nuevas de cuatro estrellas “limitadas cualitativamente, cuantitativamente y temporalmente”. Tres exigencias que “no se existen” en la ley en vigor, recalcó el portavoz parlamentario de NC, porque CC y el PSOE “rechazaron todas las enmiendas de NC que propugnaban estos principios”.
Román Rodríguez criticó al presidente canario por hacer ahora un llamamiento al diálogo cuando, en el Parlamento, emplearon su “mayoría absoluta para frenar cualquier mejora” en el texto del Gobierno. Las “voluntades se acompañan de hechos y si Rivero quiere diálogo que lo demuestre ya en el Parlamento, sin retrasar” la tramitación de la proposición del Cabildo de Gran Canaria por “sus intereses partidistas”.