Tras 23 años al frente del Ayuntamiento de Agulo (La Gomera), Néstor López, de 58 años, se despide de su vocación hacia la política local. Natural de Tacoronte, se trasladó a La Gomera cuando conoció a su mujer. Ejerció como jefe de la Marina Mercante, profesión que dejó a un lado al sacar una oposición a formación profesional y, posteriormente dedicarse a la política.

¿Qué motivos han impulsado su retirada como alcalde?

Yo por naturaleza estoy enfadado con el mundo, pero son motivos personales, no puedo dedicarle el tiempo que necesita.

¿Es una retirada definitiva o aspira a otro tipo de cargo?

Es definitiva y no quiero otro cargo, mi vocación es la política municipal y cuanto más he trabajado en ella más me gusta. Prefiero salir y ver a la gente, pelear con ella. Los políticos de otras instituciones dialogan de otra forma, negocian más que hablar, a mí me gusta la política de la calle.

¿Ha pensado quién podría ser su sustituto en el cargo?

Nosotros ya tenemos hace tiempo la cara de quien podría ser mi sustituto, pero de aquí a un par de meses se decidirá. Esperamos que nos diga que sí. Se trata de una persona joven, con un perfil de formación y bagajes políticos.

¿Apuesta entonces por las nuevas generaciones?

Sí, los ayuntamiento pequeños, con la nueva Ley de Régimen Local, hay que afrontarlos con fuerza, ánimo, ganas y mucho tiempo, cosas que yo no tengo y una persona joven sí.

¿Qué piensa de la Reforma de las Administraciones Locales?

No resuelve, sino crea muchos problemas y más en esta época tan convulsa económicamente. Pienso que es una forma de tenernos entretenidos, discutiendo por esto. No terminan de entender que esos servicios que ahora dicen que son impropios y que no tenemos que hacer, lo hacemos porque nadie lo hace, no porque nosotros queramos. No deberían olvidar que aquí se trata con personas, y que necesitan que se le den unos servicios para mantener una población. No tenemos ni una línea de transporte que nos llegue a todos los municipios, y hay vecinos que tienen que caminar hasta 7 kilómetros para llegar a la línea general y hay que luchar para cambiar esto.

¿Qué proyectos tenía en mente llevar a cabo y no ha podido?

Habían tres cosas que quería conseguir y no he podido. Una era atraque en la zona de Lepe, porque sabemos que es crucial para esta isla tener un muelle deportivo o un embarcadero. Otra era una fuente de ingresos que no tuviera dependencia y generara recursos. Esto lo habíamos vislumbrado en infraestructuras que muchas veces sufren rechazo, como fue la propuesta de una cárcel para unas mil personas; todavía se ríen entre los directivos del partido por la idea. Y, en tercer lugar, crear una macrorresidencia de tercera edad.

¿Qué mensaje deja a los vecinos de Agulo en su retira?

Que se olviden de mí, yo no he existido. Deben centrarse en el futuro alcalde.