Las habituales discrepancias entre convocantes y administraciones en las cifras de seguimiento de una huelga se acentuaron ayer más que de costumbre en la jornada de paro entre los estudiantes canarios, que se sumaban a la convocatoria efectuada a nivel nacional por varias organizaciones de alumnos.

Según datos del colectivo Estudiantes Pre-Parados recogidos por Efe, alrededor del 50% de los universitarios y del 70% de los alumnos de enseñanzas medias secundaron la protesta en las Islas, pero lo cierto es que las universidades de La Laguna (ULL) y Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC) apenas notaron su incidencia. Algo parecido ocurrió en el resto de niveles, donde, según fuentes de la Consejería de Educación, el seguimiento de la huelga rondó un magro 5%.

El paro estaba convocado para exigir de nuevo la retirada de la reforma educativa del ministro José Ignacio Wert -la polémica Lomce- y para denunciar la reducción de las cantidades que cobran los becarios del Ministerio de Educación, así como los retrasos en la resolución de las ayudas.

En este sentido, el portavoz de Estudiantes Pre-Parados, Carlos Expósito, afirmó en Las Palmas de Gran Canaria que "cuando se acerca el final del curso, más del 40% de las becas no se han ingresado a los estudiantes de enseñanzas medias y universidades" en Canarias.

En una concentración celebrada ante la Delegación del Gobierno con motivo de la huelga de estudiantes, Expósito dijo a los medios de comunicación que los motivos de esta protesta, que se convoca en Canarias junto al resto de España, "son los mismos que hace dos años, sumando el tema de las becas".

En el resto del país la huelga obtuvo también un escaso respaldo. En esta ocasión, el Sindicato de Estudiantes, la asociación con más peso del país, no participó en la convocatoria, lo que, unido a la cercanía de las fechas de los exámenes, puede explicar lo desigual del seguimiento.