La Consejería de Educación ha decidido "reforzar la información" sobre la segunda apertura en verano de los comedores escolares de las Islas. Aunque el plazo de inscripción concluía oficialmente a finales de abril, la Administración educativa ha optado por ampliarlo ante la evidencia de que el número de familias participantes se aleja bastante, por el momento, de la cifra de alumnos que disfrutan gratuitamente del servicio de comedor durante el curso debido a sus escasos recursos económicos.

La viceconsejera de Educación del Gobierno regional, Manuela Armas, reconoció ayer, en declaraciones a Radio El Día, su "sorpresa" por el descenso del número de alumnos inscritos en algunos puntos del Archipiélago. La Consejería no quiere adelantar cifras, pero de las palabras de Armas parece deducirse la dificultad de que se materialice la previsión de que los participantes crezcan respecto al pasado verano.

No obstante, la viceconsejera asegura que aún no sabe si "van a ser más o menos que el año pasado". A su juicio, la razón por la que el número de comensales en periodo estival no coincida con los que conforman el grupo con "cuota cero" se debe a que la "movilidad" de las familias es mayor en verano. Mientras que durante el curso "es obligatorio enviar al niño al centro y, de camino, comen", en verano "se van a casa de sus abuelos" o, en el caso de parejas separadas, se reparten entre los dos domicilios. "Hay una serie de condicionantes que modifican el servicio de comedor", explicó Manuela Armas.

La reapertura del plazo de inscripción obedece a la intención de "tener la tranquilidad absoluta de que todos los que han querido apuntarse hayan podido hacerlo". De ahí también el "último aviso para familias rezagadas", una tarea en la que Educación también ha implicado a los inspectores.

Otro objetivo de esta medida es el de ajustar los medios disponibles al volumen de participantes. "No queremos ofrecer más de lo que necesitamos, porque los recursos son los que son", señaló Armas.

Pese a las incorporaciones de última hora que puedan producirse, el proceso está ya en su fase final. Los listados han sido enviados a los ayuntamientos para determinar si se mantiene el mismo número de centros de 2013.