Greenpeace simuló en la tarde de ayer un vertido de petróleo en la Playa de Teresitas de Tenerife, según informó la organización ecologista en un comunicado.

De esta manera, buscó mostrar su rechazo y el de parte de las sociedades canaria y española a los sondeos petrolíferos en el mar.

Esta actividad se enmarca dentro de un día de acción estatal que decenas de colectivos de toda España, tanto de la Península como de las islas Canarias y las Baleares, organizaron para demostrar que "la sociedad se opone frontalmente a las prospecciones petrolíferas por su peligrosidad y por que son innecesarias desde el punto de vista energético".