El presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero, ha afirmado hoy que Canarias, antes que en otros gobiernos y organizaciones, está cambiando la forma "de estar y hacer política" y ha señalado que se está haciendo con medidas palpables y reales, algunas ya puestas en marcha y otras en proceso.

Rivero, en su blog, valora las medidas anunciadas esta semana por el Rey Felipe VI para mejorar y renovar la Casa Real, como someter sus cuentas a auditoría externa a partir del año próximo, preparar un código de conducta con principios de buen gobierno aplicables a sus miembros y regular los regalos que recibe la Familia Real.

En opinión de Rivero, la Casa Real se suma a la senda que algunos como el Gobierno de Canarias, ha emprendido hace tiempo y considera que las medidas anunciadas sitúa a la monarquía española en la buena dirección y refuerza la transparencia, la austeridad y la delimitación entre el ejercicio de lo público y lo privado.

El presidente canario entiende que estas medidas las exige la ciudadanía, asegura que en Canarias se están dando antes que en otros territorios y opina que acerca a modelos de funcionamiento y organización más democráticos.

Añade que la Administración autonómica canaria ha concretado cambios "más que significativos" y, entre otras medidas, cita la administración eléctrica, que permite acercar la gestión a empresarios, colectivos y ciudadanos o el portal de transparencia.

Además considera que se le ha ofrecido a los ciudadanos una forma de estar y hacer en la gestión pública y reitera que los cambios se han hecho en la defensa de los sectores más débiles de la sociedad, "colocando a la gente en el centro de las políticas y defendiendo a capa y espada el mantenimiento de los servicios básicos -educación, sanidad, políticas sociales- en estos tiempos tan difíciles y a pesar del maltrato del Estado".

Agrega Rivero que se han cerrado filas en la defensa del medioambiente, del territorio, del paisaje y de la biodiversidad, cuestiones que considera básicas no sólo para el bienestar de los residentes canarios sino también de las futuras generaciones y del turismo.

"Apostamos por una Administración que trabaje codo a codo con los ciudadanos, en donde la sociedad intervenga de manera directa y efectiva" señala Rivero, quién afirma que por ello se exige dar voz a la gente no sólo cada cuatro años durante el proceso electoral sino de forma continuada.

Al respecto cita la Ley de Participación Ciudadana, cuyo desarrollo permitirá consultar a la ciudadanía sobre decisiones "que marcan el presente y futuro de esta tierra".

También alude a la Ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública -ya remitida al Parlamento para su debate y aprobación- y el portal de transparencia, que, a su juicio, suponen un antes y un después también en el ámbito de las acciones públicas.

Para Rivero, conceptos como comunicación directa, participación o transparencia son ya compromisos afianzados en la administración canaria y no promesas de futuro.

Entiende que las medidas anunciadas por el Rey tarde o temprano se deberán extender al resto de las instituciones del Estado "en el convencimiento de que una democracia más participativa, directa y transparente será, sin duda, una democracia más fuerte".