La movilidad laboral en Canarias en el primer trimestre provocó que entrasen 7.226 trabajadores por los 7.570 que salieron, lo que arroja un saldo negativo superior a los 300 profesionales, por lo que el archipiélago se sitúa como la región con la tasa de movilidad más baja de España, según Randstad.

En las islas, Las Palmas es la provincia con la tasa de movilidad más elevada, con un 5,4 por ciento, seguida de Santa Cruz de Tenerife, con un 5,2 por ciento; sin embargo, ambas se sitúan por debajo de la media nacional (12,48%).

A nivel nacional, el primer trimestre de 2014 registra la tasa de movilidad más alta desde 2010, que se sitúa en el 12,48 por ciento. De los contratos realizados durante los tres primeros meses del año en España (3.557.000 contratos), más de 444.000 vienen motivados por la migración, ya que el trabajador consigue acceder al empleo en una provincia diferente a la de su última residencia.

Como regiones más receptoras se posicionan Madrid (37.532), Andalucía (7.531) y Murcia (4.146). Completan esta clasificación País Vasco (2.624), Baleares (1.651) y Navarra (1.492). En el lado opuesto, destacan los datos de Castilla-La Mancha, que refleja un saldo negativo de 16.443 profesionales, Castilla y León (-7.469) y Aragón (-6.569).

El informe de Randstad pone de manifiesto que existen provincias que se consideran receptoras de trabajadores. Esto viene determinado porque entran más trabajadores a desarrollar su actividad en otra provincia de los que salen. En esta línea, Jaén, con un saldo de 16.939, y Barcelona, con 11.935, son las dos provincias, junto a Madrid, que se sitúan por encima de la barrera de los 10.000. A poca distancia se sitúa Huelva, con 9.795.

Por su parte, como provincias más emisoras se posicionan Cádiz, Sevilla, Toledo, Zaragoza y Lleida, todas ellas con una diferencia negativa superior a los 5.000 trabajadores que han emigrado a otras provincias para acceder al empleo. Las Palmas y Santa Cruz de Tenerife son las provincias que menor tasa de movilidad registran.

PERFIL DE LA MOVILIDAD

Uno de los factores que tienen relación directa con la movilidad de los profesionales son la edad y el sexo. Si bien a nivel nacional la tasa de movilidad se sitúa en el 12,48 por ciento, se aprecia que es superior en hombres (14,8%) que en mujeres (9,4%). Asimismo, el estudio refleja que las edades donde la movilidad es más elevada abarca entre los 25 y los 34 años, con un 14,1 por ciento, y entre los 35 y los 44, con un 12,8 por ciento.

El estudio de Randstad revela que el sector servicios es el que más contratos de movilidad engloba, en términos absolutos. Sin embargo, tiene una tasa de movilidad inferior al resto de sectores. El 76% de los trabajadores españoles desarrolla su actividad en el sector servicios, pero sólo el 57 por ciento de los contratos firmados ha implicado movilidad.

Agricultura es el sector con una tasa de movilidad más elevada. Mientras apenas un 5 por ciento de los ocupados en España está empleado en él, más del 27 por ciento de los contratos registrados han motivado un cambio de residencia por parte del profesional.

Industria, por su parte, se sitúa con una tasa de movilidad por debajo de la media nacional. En este caso, el 7 por ciento de los contratos implica que el trabajador cambie de provincia para acceder al empleo, mientras que el sector representa al 13,6 por ciento de los profesionales ocupados.