La última lista de contratación de personal elaborada por la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias se remonta a 1999, una vez que se transfirieron las competencias en materia sanitaria a la comunidad autónoma; aunque en este año lo que realmente se hizo fue actualizar las correspondientes solo a medicina de familia y enfermería que, junto a la resto del personal sanitario, había sido aprobada dos años antes (1997).

Esto significa que la Consejería carece de listados de reserva de profesionales en casi todos los puestos de trabajo, con la excepción de celadores que, como en su momento se presentaron cerca de 5.000 aspirantes, es de las pocas listas que no se ha agotado.

Como Sanidad no ha ideado ninguna nueva lista de contratación desde entonces, son las gerencias las que han ido elaborándolas según sus criterios y sistemas, variando incluso de un centro a otro, como es el caso del Hospital Universitario Nuestra Señora de Candelaria (HUNSC) y el Universitario de Canarias (HUC), donde el procedimiento es completamente diferente, entre otras cosas por la demora en la integración en el Servicio Canario de Salud (SCS) que tuvo este último.

Es precisamente estas diferencias y las posibles arbitrariedades que puede generar lo que ha hecho que los sindicatos incluso hayan llevado la cuestión a los tribunales, como es el caso del HUC, ya que consideran que puede haber prevaricación por parte de la dirección del centro.

Para Román Rodríguez -bajo cuyo mandato como director del Servicio Canario de Salud primero, y como presidente del Gobierno de Canarias después, se hizo la última lista de contratación autonómica-, es "insólito que 15 años después no se haya gestionado la situación para garantizar un sistema transparente y sin arbitrariedades en la selección y contratación del personal sanitario".

El actual diputado de Nueva Canarias califica de "irresponsabilidad" la situación y acusa a la actual consejera, pero también a todos los que ha habido después de su salida del gobierno, de "pésimos gestores".

"Desde 2003 ni hay lista de contratación, ni se ha hecho un concurso de farmacias, ni se ha abierto un hospital. ¿Qué han estado haciendo entonces?", se cuestiona.

Quien quiera trabajar tiene que ir a la OPE

Como solución a la falta de una lista de contratación desde hace 15 años, la Consejería de Sanidad ha previsto que esta se elabore incorporando a las personas que se presenten a la Oferta Pública de Empleo (OPE) y que no obtengan plaza. Esta decisión es muy criticada desde el sindicato de enfermería Satse, cuya portavoz, Ramona Mendoza, asegura que "no tiene ningún sentido". "No solo se tendrán que presentar los que realmente quieran una plaza sino aquellas personas que lo único que quieren es entrar en una lista de contratación. Es una mezcla que no tiene ningún sentido y que además desbordará, aún más, la convocatoria, a la que se prevé que se presenten miles de aspirantes". Desde Satse aseguran que "no pararán" hasta que la Consejería acceda a separar ambas convocatorias y aluden a que "la propias bases de la OPE no contemplan que de ahí se obtenga luego la lista de contratación".