La Asociación de Agricultores y Ganaderos de Canarias (Asaga Canarias Asaja) ha alertado sobre la importación masiva de papa, procedente principalmente del Reino Unido, que este año se ha adelantado coincidiendo en los puntos de venta con las producciones locales, lo que está provocando graves perjuicios en la comercialización por una cuestión de mayor oferta y precio, además de desequilibrar el mercado de abastecimiento.

A través de una nota, la Asociación ha querido recordar que la mayor cosecha de papa canaria se produce durante los meses de abril a julio y es durante este periodo cuando normalmente los agricultores y grandes operadores comerciales pactan un acuerdo para dar salida a la producción local y reservar las importaciones hasta que el mercado esté más desabastecido; sin embargo, este año los mayoristas han optado por darle prioridad a las producciones importadas, que suelen generar mayores rentas, explica Asaga Canarias.

Los productores de papa local se quejan de que los mismos que les venden la semilla para cultivar este tubérculo en las islas son quienes luego importan papa de otros países "a sabiendas de que supondrá una competencia desleal para este producto". No obstante, quieren dejar claro que no se oponen a la importaciones. "Lo único que pedimos es que se realicen, como siempre, en el momento en que no perjudiquen directamente a nuestro medio de vida porque, por ahora, lo que se está consiguiendo es que se generen excedentes", señalan.

Según Asaga Canarias, las producciones de secano de papa del norte de Tenerife, que ocupan una superficie de cultivo de 1.295 hectáreas y supone el sustento económico de miles de familias son las más afectadas en este momento, sobre todo las recogidas en la zona de Benijos (La Orotava), Palo Blanco (Los Realejos) y San Juan de la Rambla, con más de 2,5 millones de kilos todavía sin vender. Por el contrario, las del sur, al ser más tempranas, ya se han comercializado en su totalidad.

La Asociación reconoce que, pese a esta situación puntual, algunas empresas de la gran distribución han realizado en los últimos años un esfuerzo importante por impulsar las producciones de papa local al valorar su calidad, así como para atender la demanda del consumidor canario, de un producto considerado la estrella de la gastronomía de las islas.

Aún así, esta organización profesional quiere insistir en la importancia de que esta línea de trabajo no se abandone y continúe en el futuro porque entiende que "cuando se adquiere un producto local, la riqueza se queda en Canarias y, dadas las circunstancias, se contribuye de esta manera a la recuperación de la economía, además de que se preserva la biodiversidad de la posible entrada de nuevas plagas y enfermedades".

También hace hincapié en la creación de sinergias con el sector turístico y de restauración para dar salida a este tubérculo teniendo en cuenta su potencial nutritivo y culinario. Además, indica que se está trabajando para generalizar el uso del logo de las regiones ultraperiféricas (RUP) en estas producciones como marca diferenciadora de calidad.

Por otro lado, los productores locales ya han advertido de que están dispuestos a tomar medidas más drásticas como repartir papas delante de las grandes superficies que descarten la comercialización de papa local en favor de las importaciones.