La consejera de Cultura, Deportes, Política Social y Vivienda, Inés Rojas, reveló hoy que en el archipiélago, durante 2013, 1.422 niños y niñas de 0 a 6 años vivían en familias de acogida, mientras que 937 lo hacían en centros dependientes del Ejecutivo regional, y agregó que el objetivo era conseguir que el cien por cien vivan en familias de acogida.
La consejera, en una comparecencia parlamentaria sobre el plan de acogida infantil, instada por el grupo Nacionalista canario, subrayó que el programa está funcionando bien y que en los dos últimos años más de 3.000 familias canarias han solicitado información sobre el citado plan, y que el 76 por ciento han continuado interesándose tras las primera informaciones.
Rojas señaló que la infancia debe ser una época feliz y que los niños deben crecer en un entorno adecuado, pero cuando la familia biológica no pueden brindar esto, se tiene que recurrir al amparo del Gobierno canario o a una familia de acogida y en la actualidad hay más menores en familias que en centros de acogida.
"Nuestro objetivo es que el cien por cien de los niños estén en familias de acogida, y que la edad se extienda hasta los 18 años", añadió.
La consejera aclaró que estas familias acogentes no tienen derecho a la adopción y saben que la acogida no es indefinida.
Inés Rojas señaló que el Gobierno regional va a continuar con el plan de acogida infantil y que la directiva europea va en esa dirección.
Rosa Guadalupe Jerez, del grupo Socialista, aseveró que el plan de acogida es positivo y facilita a los menores integrarse en familias normalizadas.
"Es un programa que da una oportunidad a los niños y niñas de vivir en un entorno familiar y no tienen que vivir en centros de protección", subrayó.
Flora Marrero, del grupo nacionalista, dijo que su deseo era que los niños crezcan felices en un entorno adecuado, "pero cuando esto no es posible los menores deben ser protegidos".
Marrero destacó el "valor"de las familias acogentes porque tienen en sus casas a niños y niñas durante unos años y luego puede ser que no los vuelvan a ver.
La diputada se congratuló de que 3.000 familias canarias hayan solicitado información sobre el plan de acogida y que señaló que el objetivo sería que al menos el 50 por ciento de ese total pueda terminar como familia acogente.