Mañana, el Parlamento regional dará su bendición a la modificación del Régimen Económico y Fiscal de Canarias (REF) a la que Bruselas ya dio su visto bueno a principios de mes y que el viernes pasado aprobó el Consejo de Ministros. Tras el informe de la Cámara canaria -preceptivo, pero no vinculante-, el Ejecutivo central lo convalidará en el Congreso, pero se trata de una mera formalidad, pues entró en vigor el viernes. Su actualización cuenta con el firme respaldo de la Administración regional -lo que es lógico ya que Canarias negoció desde 2012 el bloque fiscal de este instrumento con el Estado y la Unión Europea-, pero aunque también tiene la simpatía de los empresarios, hay partidos y sindicatos que critican su actualización.

El viceconsejero de Economía y Asuntos Económicos con la Unión Europea del Gobierno de Canarias, Ildefonso Socorro, asegura que el 90% de sus cambios provienen de una resolución aprobada por el Parlamento canario, que "contó con el respaldo en bloque de todas las fuerzas políticas" allí representadas en réplica a las críticas de Izquierda Unida Canaria (IUC), que denuncia que el REF mantiene "privilegios fiscales para los sectores más adinerados", y de UGT Canarias, que lamenta el "continuismo" en su actualización.

En concreto, IUC plantea que, a igual cantidad de recursos, el gasto público de los fondos europeos han tenido una mayor contribución para la economía canaria que los "enormes" descuentos fiscales de la RIC y teme que el REF se haya modificado sin que se hayan evaluado sus efectos "de forma independiente", por lo que implicará, entre otros aspectos, "una pérdida de oportunidades de empleo" para los canarios.

Por su parte, UGT señala que, aunque el "pretexto" para justificar los cambios "en el mayor periodo de crisis que se recuerda" es la creación de empleo, "lo cierto es que los efectos reales que tendrán sobre el mismo serán muy limitados" y ve que " no se garantiza que sea de calidad ni estable".

Socorro defiende que, en efecto, todas las modificaciones introducidas buscan favorecer la creación y el mantenimiento del empleo. Cree que los nuevos puestos de trabajo en el marco del REF "sí serán estables" porque quedan vinculados al incremento neto de la plantilla de las empresas, que debe mantenerse a lo largo de tres años. Los cambios en la RIC, la ZEC y las nuevas deducciones, insiste, están pensados para favorecer la creación de empleo.

UGT tilda de "desnaturalización" que ahora se permita deducir por invertir en ciertos países de África occidental, "sobre todo ante una falta de control y de vigilancia" de esa figura, "como ha sucedido históricamente con la RIC". Pero el viceconsejero responde que "si hay algo controlado en este país, es el REF".

Esta medida, remarca, "no tiene nada que ver" con la propuesta que en su momento lanzó el PP para materializar la RIC en África y a la que se opuso el Gobierno canario. "Esta deducción busca la internacionalización de pequeñas y medianas empresas, que es algo que se pide desde todos sectores, pero luego algunos lo critican en abierta contradicción".

El secretario general de la Confederación Canaria de Empresarios (CCE), José Cristóbal García, cierra filas con el Gobierno. "Mejora la RIC, permite crear empleo sin vincularlo a inversiones, actualiza otros aspectos y elimina algunos de los viejos problemas", resume, por lo que el balance general "es positivo sin lugar a dudas".

Del "consultamos a todos" al "faltó diálogo y contacto"

Socorro defiende que, desde el inicio mismo en que el Gobierno regional abordó la negociación para actualizar el REF recabó la opinión de "todos" los ciudadanos a través de una consulta pública vía internet, además de consultar a los "principales" agentes económicos y sociales -en alusión a las patronales y los sindicatos- así como las universidades y otros.

Esas aportaciones, explica, las recogió el Gobierno regional en una comunicación que envió al Parlamento y que dio lugar a una resolución aprobada por unanimidad en 2012.

Este asunto de la participación no es pacífico. Tanto los sindicatos como los empresarios criticaron durante mucho tiempo que el Gobierno elaboró la propuesta que negoció con Madrid y Bruselas sin darla a conocer en las Islas.

"No ha habido todo el diálogo y el contacto que se hubiera querido", asevera García. "No hubo las negociaciones que debieron producirse y tuvimos que participar por nuestra cuenta en Madrid y Bruselas", lamenta. Además, "el Gobierno regional debería haberse tomado esto más en serio", remata.

¿QUÉ CAMBIA?

Cinco grandes áreas del REF concentran las principales modificaciones: la Reserva para Inversiones de Canarias (RIC); la Zona Especial Canaria (ZEC): una nueva deducción por inversiones en África occidental: la ampliación de las bonificaciones por actividades tecnológicas, y otra por producciones cinematográficas.

En cambio, se mantiene la Deducción por Inversiones en Canarias (DIC), que amplía su aplicación de cinco a quince años.

La RIC permitirá a partir de ahora materializar hasta el 50% de la dotación para contratar trabajadores sin tener que realizar una inversión -como venía siendo hasta ahora- con la doble limitación de un tope máximo por empleado de 36.000 euros y que aumente la plantilla. Además, se permite la posibilidad de titularizar sus proyectos para captar grandes inversores; utilizarla para rehabilitar en cualquier zona turística -ya no lo limita a las que están en declives-; elimina restricciones para invertir recursos de la RIC en la ZEC así como la exigencia de un plan de inversiones.

La ZEC modera las sanciones "que eran muy altas"; amplía la base imponible en 500.000 euros por cada empleado contratado por encima del mínimo requerido -si el proyecto sobrepasa los 50 trabajadores, directamente no hay límite-; suprime la restricción geográfica -todo el Archipiélago es ZEC-; aumentan las actividades permitidas, y el plazo de inscripción se alarga a 2020 y el de disfrute, a 2026.

La deducción por invertir en África queda ligada a aumentar la plantilla de la empresa en Canarias, que debe mantenerse por tres años. Solo pueden acogerse pymes -no grandes empresas- que deducirán tras realizar las inversiones -no antes- el 15% de las cuotas si son pequeñas, y el 10% si son medianas.

La innovación da derecho a una deducción que pasa del 32% al 45% sobre la inversión, y la producción de cine contempla un límite mayor de la base imponible y del tipo en el Archipiélago que el de la Península.