El Servicio de Urgencias del Hospital Universitario de Canarias (HUC) atraviesa por una de sus peores crisis asistenciales, puesto que desde el viernes -aunque ya el jueves se notó un repunte de pacientes- permanece en una situación de colapso total que incluso ayer obligó a la inmovilización temporal de, al menos, media docena de ambulancias a las que no se les podía devolver la camilla debido a la falta de medios y espacios en el interior del servicio.

La causa no es otra que la llegada masiva de pacientes afectados de problemas respiratorios agudizados por la situación de calima y frío, según confirmaron los propios profesionales del servicio y también la dirección de HUC.

No obstante, la situación de desorganización fue aumentando de tal manera durante el fin de semana que a la una de la tarde de ayer se tuvieron que suspender las visitas de los familiares a los pacientes, dada la acumulación ingente de pacientes, tanto en los cubículos como en los pasillos, e incluso en la propia entrada del servicio, lo que, unido al propio personal sanitario, hacía prácticamente intransitable todo el servicio desde la misma entrada.

Y es que si la presencia de filas de pacientes en camillas a un lado del pasillo es ya es un tónica prácticamente habitual en las urgencias del HUC, desde el jueves esa fila se ha multiplicado y se encuentra a ambas filas del pasillo, haciendo muy dificultoso el tránsito.

Y es que, según confirmó ayer un sanitario del servicio de urgencias, "no cabe nadie más", instantes antes de explicar que "la mayor parte de los casos son personas de mucha edad, de 75 años para arriba, a los que la calima les afecta muy negativamente. Además de que hay un notable incremento de virus respiratorios y de gripe A".

Este argumento coincide plenamente con el de la dirección del HUC, que, además, ayer confirmó que "el centro hospitalario ha respondido contratando a personal de enfermería y reforzando tanto los turnos médicos como el personal de información".

No obstante, evitaron pronunciarse sobre la escasez de medios y de espacios que obligó a inmovilizar numerosas ambulancias, ante la imposibilidad de devolverles las camillas, o la habilitación de parte del hall de entrada a urgencias para ubicar camillas con pacientes hasta que quedaran huecos en el interior del servicio.

IC: "¿Y las camas prometidas para enero?"

Intersindical Canaria pide explicaciones de la "dramática y tercermundista" situación de las urgencias del HUC a la directora del Servicio Canario de Salud, Juana María Reyes, y al gerente del hospital, Ignacio López-Puech.

"Hubo un compromiso tajante de ambos dirigentes con este sindicato de que a finales de este mes de enero se iban a abrir 50 camas en el Hospital del Norte y de esto, a estas alturas, aún no se sabe nada, pero lo mismo ocurre con las tan anunciadas obras para habilitar 23 nuevas camas para las urgencias del HUC, también en enero, y que aún ni siquiera se han licitado", denunció ayer su portavoz, Catalina Darias.

Preguntada por este asunto, ayer la dirección del centro hospitalario se limitó a recordar que "la obra para la ampliación del número de camas en la zona antigua de consultas (23) está prevista para este año, estando diseñado ya el proyecto y las nuevas urgencias ginecológicas se pusieron en marcha a mediados del mes de diciembre".

testimonios

"Es más allá de lo tercermundista" Candelaria ha tenido a su madre buena parte del fin de semana en una camilla ubicada en el hall de las urgencias y asegura que "el trato a los pacientes es inhumano".

"Los pacientes están abandonados" José Ángel asegura haber visto a pacientes en los pasillos durante horas sin que nadie se interesara por ellos y pide responsabilidades a los poderes públicos, a los que acusa de mirar para otro lado.

"Es un milagro que no haya muertos" Antonio está en urgencias desde el viernes con su padre y asegura que el personal está saturado y que no puede más.

"Si hay una catástrofe, ¿dónde los meten?" Julia asegura que en las urgencias no cabe un alfiler y se pregunta qué pasaría si hay algún tipo de accidente con múltiples heridos.