La Fundación para el Análisis y los Estudios Sociales (FAES), ligada al Partido Popular, publica en su revista ''Papeles'' un artículo en el que refleja a Canarias como la comunidad más perjudicada en el actual sistema de financiación, y que apunta dicho sistema se aprobó para contentar a Cataluña "frenando posteriores demandas nacionalistas" y que a la vista de los acontecimientos "es evidente que el fracaso ha sido rotundo".

El artículo ha sido redactado por Juan José Rubio Guerrero, catedrático de Hacienda Pública de la Universidad de Castilla-La Mancha, y por Santiago Álvarez García, profesor titular de Hacienda Pública de la Universidad de Oviedo.

Los dos expertos añaden que también es un fracaso el resultado económico del sistema, porque mantiene "grandes diferencias" en financiación por habitante después de la nivelación y tampoco atiende al principio de ordinalidad, "al que tanta importancia se concedió" y que supone que las comunidades con más capacidad fiscal no pierdan muchas posiciones tras la nivelación.

Rubio y Álvarez, a partir de datos de Hacienda y Administraciones Públicas, han elaborado su propia conclusión del funcionamiento del sistema en 2012, último año liquidado para las 15 autonomías acogidas (todas menos País Vasco y Navarra).

DE MADRID A CANARIAS

Así, por ejemplo, Madrid, comunidad con más capacidad fiscal, pasa al puesto 9 en financiación total, sobre la media por habitante ajustado; Baleares pasa del 2 al 8 y Cataluña, del 3 al 10. En el otro lado, Extremadura ocupa el puesto 14 en capacidad fiscal y el 3 en financiación, mientras Canarias cierra ambas tablas, puesto 15.

Cantabria, según sus cálculos, es la comunidad con más financiación total en 2012 y ocupa el cuarto lugar en capacidad fiscal. Aragón y Asturias casi no cambian de posición en ambas tablas y La Rioja pasa del puesto 7 en capacidad fiscal al 2 en financiación total.

La Comunidad Valenciana pasa de ser la octava en capacidad fiscal a la número 14 en financiación, penúltimo lugar; Castilla y León va del 9 al 6, Galicia del 10 al 7 y Murcia, del 11 al 13. Castilla-La Mancha ocupa el puesto 12 en capacidad de financiación y el 11 en la financiación total que logra, Andalucía casi tampoco cambia, del 13 al 12.

CONDICIONANTE POLÍTICO

Ambos explican que en la reforma del sistema en 2007 no se optó por actualizar el modelo entonces, para actualizar las necesidades de gasto de las comunidades del régimen común, sino que se abordó una reforma sustancial porque existía un "condicionante político".

A juicio de estos expertos, se trató de trasladar al conjunto de las comunidades el sistema de financiación recogido en el nuevo Estatuto de Autonomía de Cataluña, pero con "falta de transparencia", hasta el punto de que las autonomías desconocían el alcance real del nuevo sistema y las consecuencias que tendría para ellas.

Señalan que la nueva fórmula para repartir la financiación incluyó "un reparto arbitrario" de los fondos adicionales que aportaba el Estado, lo que "no permitió compensar las diferencias de partida existentes, derivadas de la aplicación del sistema anterior".

El resultado es un sistema, según este trabajo, que no es equitativo horizontalmente, que "sigue manteniendo importantes diferencias de financiación por habitante".

"Tampoco cumple con el denominado principio de ordinalidad, al que tanta importancia se concedió en la reforma, ya que la aplicación de los mecanismos de nivelación continúa reordenando los recursos por habitante de que disponen las comunidades respecto a su capacidad tributaria", se añade.

"ESPECIALMENTE ARBITRARIO"

La conclusión de ambos expertos en Hacienda es que el sistema es "especialmente arbitrario" y que la Comunidad de Madrid, que es la que presenta una mayor capacidad fiscal, "es la que resulta más perjudicada, situándose su financiación total muy por debajo de la media".

"En realidad, se dan todos los supuestos posibles. Comunidades con capacidad fiscal superior a la media mantienen o incluso mejoran sus resultados después de la nivelación, mientras otras los empeoran. En el otro extremo, comunidades con capacidad fiscal inferior a la media continúan por debajo de esta después de la nivelación, mientras otras mejoran sus resultados", explican.

En el trabajo se añade que la crisis económica ha "pesado de forma importante" en el fracaso del sistema de financiación, porque se reformó con unos criterios de ingresos tributarios que no se han cumplido.

"Es evidente que esta caída de ingresos hubiera afectado tanto al sistema anterior como al actual. La crítica que hacemos es, nuevamente a la opacidad con que se realizó la negociación del nuevo sistema y al hecho de que la diferencia en la situación económica no fuera tenida en cuenta", dicen los expertos.