El Consejo Consultivo de Canarias ha dado su visto bueno al proyecto de decreto del Gobierno de Canarias para que la adjudicación de potencia eólica se realice mediante autorización administrativa y no mediante concurso.

El ejecutivo reconoce así el fracaso del sistema de concurso, una "anomalía" que había llevado a la judicialización de las adjudicaciones y que ha supuesto que desde 1996 no se haya instalado en las islas ni un solo molino eólico.

La judicialización de los concursos había impedido la instalación de 442 megavatios de energía eólica, "empantanados como consecuencia de los conflictos judiciales", según el portavoz del ejecutivo, Martín Marrero.

La producción eléctrica mediante energías limpias supone en Canarias solamente el 6 por ciento del total, y con el cambio en el sistema de adjudicación de energía eólica el Gobierno de Canarias prevé que en dos años se alcance el 20 por ciento,

"El sistema de concurso, que es una anomalía y una excepcionalidad en el actual sistema, ha demostrado ser completamente inviable por su judicialización, frente a una autorización que permite que cualquiera que presente un proyecto con todas las garantías obtenga potencia", según la consejera de Empleo, Industria y Comercio, Francisca Luengo.

El ejecutivo ha señalado que el procedimiento de autorización es el que ya se aplica en el resto de energías renovables y en todas las infraestructuras eléctricas y energéticas.

El Gobierno de Canarias considera que "el nuevo sistema garantiza la igualdad de oportunidades de los que quieran participar en la explotación de la potencia eólica, tanto públicos -ayuntamientos o mancomunidades- como privados".

Los interesados no tendrán que competir, sino que el que presente un proyecto y cumpla con los requisitos de ordenación del territorio y medioambientales obtendrá la potencia.

Martín Marrero señaló que con este decreto se fomentará la energía eólica, que produce menor impacto ambiental, reduce la dependencia del exterior, diversifica las fuentes de energía y se produce a coste cero porque la materia prima es el viento.

El decreto además simplifica los tramites administrativos tanto para la puesta en funcionamiento de nuevos parques eólicos como para ampliar los existentes o para modificarlos.

El decreto del Gobierno de Canarias establece un periodo transitorio para las empresas que habían presentado sus proyectos y que no habían obtenido una resolución, o que habían sido adjudicatarias pero habían perdido la adjudicación por sentencias judiciales.

Estas empresas no tendrán que presentar proyectos nuevos, sino que se les valida la documentación ya presentada y podrán obtener en su caso la autorización correspondiente.